Portavoces de Monastery han afirmado que Colombia, su país de origen, tiene una industria textil fuerte y prometedora, donde la empresa ya ha demostrado estar a la altura de un público que exige calidad y lujo.
Entre la segunda mitad del 2021 y la primera del 2022 se tiene prevista la apertura de tiendas físicas en Bogotá, Medellín, Barranquilla, Cali y Bucaramanga.
Y es que los directivos de la marca buscan facturar hasta 7 millones de dólares en el año en curso, luego de facturar 1,5 millones de dólares y haberle dado empleo a 40 personas.
Internet y el comercio electrónico han sido los principales aliados de Monastery, pues las nuevas tecnologías han permitido que sus productos lleguen a cualquier lugar del mundo.
La marca comenzó como un emprendimiento entre amigos. Pero luego de que los principales fundadores fueran a Las Vegas a una feria comercial, decidieron impulsar la marca con todo lo que ello implica y con una dedicación que hoy se refleja en los resultados y expectativas de la empresa.
La calidad, el servicio y los precios asequibles con los tres ángulos que sustentan la filosofía productiva de Monastery Couture y todo su portafolio.
"Nuestra marca representa lo que nosotros queremos expresar al mundo. Para nuestros clientes e involucrados es una muestra visible de la calidad, originalidad, presentación y pasión plasmados en nuestros productos y servicios. Es por eso que merece ser tratada con cuidado, consistencia y orgullo", expresa la compañía.
Para hombre hay camisetas, camisetas polo y camisetas manga larga. Las mujeres, por su parte, podrán encontrar diversos estilos de camisetas y tops, acordes a la personalidad de cada una.
Otro punto clave es la línea de accesorios que incluye gorras, bolsas y riñoneras. Los perfumes, desde luego, no se quedan atrás.
Pero la responsabilidad social no fue algo de lo que se haya olvidado el equipo de Monastery. A nivel laboral, buscan emplear madres cabezas de familia. Y, además, cuentan con un programa llamado Monastery AID que se enfoca en comunidades vulnerables tales como adultos mayores, enfermos terminales, personas afectadas por el virus COVID-19 y niños abandonados. Todo eso sin contar que la empresa se está especializando en prácticas sostenibles y amigables con el medio ambiente.