Alejandro Restrepo y sus dirigidos enfrentan el partido más importante de la temporada.
Tras la clasificación de Corinthians, hoy continuará la definición de los semifinalistas en la Copa Sudamericana. El reto es para Medellín y Lanús, quizá dos de los equipos más regulares del campeonato, quienes sobresalen por ser fuertes en casa y competitivos fuera. Un duelo que para ambos equipos significa más que un juego o clasificación; internamente es la oportunidad para seguir compitiendo y mantener viva la temporada, pues ambos conjuntos no viven el mejor presente en el torneo local. El DIM es décimo sexto del campeonato y viene de perder en casa 0-1 ante Tolima con una nómina alterna. Por su parte, el ‘granate’ también cayó el fin de semana 3-0 ante Huracán y actualmente es décimo quinto de la liga profesional de fútbol argentino.
En el conjunto antioqueño se siente un ambiente de optimismo y motivación. Anoche, los jugadores recibieron el cariño de la afición con el popular banderazo. Medellín, en el papel, tiene todo a favor: la localía, el regreso nuevamente al estadio Atanasio Girardot, el invicto en condición de local y el resultado positivo conseguido ocho días atrás en el Néstor Díaz Pérez. Además, el factor motivacional que engrana a todo un país que espera ver a un equipo colombiano nuevamente en la ronda de semifinales. Para el DIM sería la primera vez en toda su historia como club que llega a esta instancia en un certamen internacional; ya en 2018 había estado cerca, pero finalmente fue eliminado por Cerro Porteño.
“Es un rival de mucha exigencia. Lo vimos en el partido de ida; tiene jugadores en sus filas de buen perfil, una buena trayectoria y, por algo, está en estas instancias al igual que nosotros. Sabemos que va a ser un partido donde los detalles y la atención competitiva van a ser muy importantes”, agregó Alejandro Restrepo.
Los números en condición de local para Medellín son extraordinarios. En cuatro salidas ha sumado 4 victorias, siendo superior a sus rivales y anotando en dos oportunidades 4 goles. (César Vallejo, Defensa y Justicia, Always Ready y Palestino) son los equipos que han ido a la ciudad de la eterna primavera y no han podido arrebatarle puntos a un sólido DIM que, jugando en casa, ha anotado 14 goles y ha recibido 3 en esta edición de la Copa. Aun así, los jugadores y el cuerpo técnico saben que el juego de esta noche tiene otra connotación y que el rival que está enfrente ve el partido como una final, mereciendo quizá, por juego y opciones generadas en el juego de ida, ir ganando la serie.
“Lanús fue superior, lo sometió y le generó chances de gol. El VAR nació a partir de buscar un elefante, no una hormiga”, indicó molesto el entrenador Ricardo Zielinski. El “ruso” arribó a Medellín con 23 jugadores, donde cuenta con la presencia de sus dos hombres clave en ataque, Walter Bou y Eduardo Salvio, pero sin la presencia de Abel Lucciatti, quien sufrió un desgarro en el cuádriceps izquierdo.
Jugando en condición de local, Medellín nunca ha enfrentado a Lanús. Aun así, se ha topado 10 veces contra equipos argentinos, donde aparecen clubes como Boca Juniors, River Plate, Atlético Tucumán, Banfield, Racing, San Lorenzo y Defensa y Justicia. El saldo no es positivo; el conjunto antioqueño ha ganado 3 veces y ha perdido 7. Sus tres antecedentes positivos son la victoria 1-0 ante Boca en la Copa Libertadores de 2003, el triunfo ante Atlético Tucumán 1-0 en la tercera ronda de la Copa Libertadores 2020 y, recientemente, el triunfo 2-1 ante Defensa y Justicia por fase de grupos de la Copa Sudamericana.
Alexander Cortés