Impactar con hechos es la intención que le permite a la Fundación el Sembrador trascender en sus campañas sociales.
Las labores de servicio a la comunidad son un inmenso caudal de aprendizaje. La labor de servicio y entrega a los más necesitados, es la posibilidad que tienen los seres humanos para dejar huellas de amor y solidaridad en aquellos que viven momentos difíciles. Esta parece ser la misión que compromete a la Fundación de voluntariados el Sembrador.
El Voluntariado el Sembrador diseñó, dentro su plan operativo anual, una campaña importante de desarrollo comunitario. El objetivo es desarrollar con las mismas comunidades proyectos que impacten. En ese marco se escogieron varias zonas, teniendo presente que fueran sectores vulnerables; importante destacar que, en algunas de estas zonas, la Fundación ya había hecho presencia y trabajo con voluntarios y misioneros de la Confederación Internacional de TEOTERAPIA (ICT).
Paso seguido, se contactó a los diferentes líderes sociales de las comunidades para socializar el plan operativo anual. Después vino la inmersión del proyecto en la comunidad, que se hizo en las campañas hechas por las brigadas sociales de atención integral.
“El objetivo mayor es vincular a las familias a todo el programa de desarrollo comunitario que está destinado a un mínimo de 5 años; para así, estar más cerca y en contacto con estas y realizar procesos de diagnóstico que dará pie a iniciar futuras campañas y proyectos”. Indicaron para esta casa radial las directivas de la Fundación, en una entrevista hecha por reporteros del programa NUESTRA CASA, programa de la Cadena Colmundo y quienes pudieron asistir a algunas brigadas en la ciudad de Bogotá, creando así espacios para transmitir en vivo lo que cada actividad se realizaba en el programa de estas brigadas.
Inicialmente, las familias beneficiadas recibieron un paquete nutricional y el taller ‘EN RUTA’. El proceso de recolección fue efectivo gracias a la alianza estratégica y el acuerdo de operatividad con la ICT, ya que a través de las distintas sedes de TEOTERAPIA y sus gestores sociales, hicieron una labor fundamental difundiendo la información necesaria para recolectar los paquetes nutricionales. El tiempo de recolección fue aproximadamente de 3 semanas, mientras que los cronogramas para cada actividad de desarrollo social y brigadas se establecieron desde la oficina Nacional del Sembrador
La logística se pudo establecer, de igual manera en la que se pudo llevar a cabo a lo largo del mes de mayo de 2022, gracias a los equipos de voluntarios que hay en cada territorio. Llama la atención la forma, convicción y compromiso en que los feligreses de la ICT, con quienes existe un acuerdo de cooperación, dedican horas para apoyar y participar dentro de las brigadas.
El Voluntariado el Sembrador, en conjunto con la ICT ha beneficiado en esta primera etapa a 1.201 familias, lo que equivale a 2.969 personas con 1.201 paquetes nutricionales. En el proceso intervinieron 12 territorios distribuidos en diferentes regiones y 621 voluntarios.
Escrito por Humberto ‘ToTo´Torres