Este domingo se presentó un tiroteo en el edificio de Lakewood Church en Houston, Texas, iglesia dirigida por el reconocido pastor Joel Osteen. El hecho dejó a un niño de 5 años gravemente herido, según informaron las autoridades. La agresora fue abatida, resultando también otro hombre herido.
Dos agentes fuera de servicio, presentes en la iglesia durante el incidente alrededor de la 1:50 p.m. (hora local), respondieron disparando y neutralizaron a la sospechosa, quien falleció, según se anunció en una conferencia de prensa.
Además del niño, un hombre de aproximadamente 50 años sufrió heridas en el tiroteo cuyos motivos aún no se esclarecen. La policía explicó en una conferencia de prensa que una mujer ingresó a la iglesia Lakewood Church y comenzó a disparar, llevando consigo al niño herido.
El pastor Osteen, quien estuvo en una rueda de prensa en horas de la tarde donde relató los hechos, expresó que la situación podría haber sido aún más grave si el tiroteo hubiera ocurrido durante el servicio principal de las 11:00 a.m., que suele estar más concurrido. “Estamos desolados”, comentó, agregando que ofrecerá sus oraciones a las víctimas y sus familias.
Testigos relataron a los medios locales que escucharon gritos de “hay un atacante, hay un atacante” mientras corrían hacia una biblioteca dentro del edificio.
Alrededor de la 1:53 de la tarde, una mujer de unos 30-35 años ingresó a la propiedad de Lakewood Church a través del estacionamiento. Según algunos testigos llevaba una gabardina donde escondía la escopeta, además iba acompañada de un niño de 4-5 años, (aún no se ha logrado establecer la edad.
De acuerdo al informe policial dado por el jefe de la policía de Houston, Troy Finner. La mujer comenzó a disparar en un momento dado, y dos agentes fuera de servicio respondieron, resultando en su fallecimiento en el lugar. Lamentablemente, el niño resultó herido y se encuentra en condición crítica en el hospital, mientras que un hombre de 57 años también sufrió heridas de bala y está recibiendo tratamiento.
Finner destacó la gravedad de la situación al mencionar que la mujer tenía un arma larga, y señaló que la intervención de los agentes evitó un desenlace aún más trágico. El tiroteo tuvo lugar entre dos servicios religiosos cuando los asistentes llegaban para el servicio en español, según la iglesia.
La iglesia Lakewood, la tercera megaiglesia más grande de Estados Unidos, atrae a alrededor de 45,000 personas semanalmente a sus servicios religiosos, según el Hartford Institute for Religion Research.
Además se reveló que la mujer amenazó con tener una bomba y roció una sustancia desconocida cuando los primeros agentes llegaron a la escena. Aunque no se aclaró de inmediato qué sustancia era, la policía revisó un vehículo y una mochila relacionados con la sospechosa en busca de posibles explosivos, sin reportar ninguno.
Imágenes y videos del exterior de la iglesia mostraban una respuesta activa de la policía y vehículos de emergencia. Las autoridades instaron a las personas a evitar la zona. La iglesia Lakewood comunicó la situación en redes sociales, solicitando oraciones por la comunidad.
La mujer, cuya identidad no ha sido revelada públicamente, portaba un rifle largo y una mochila, vistiendo una gabardina al entrar desde el estacionamiento de la iglesia para realizar los disparos. El edificio fue evacuado por las autoridades, y el área permanece acordonada mientras se lleva a cabo una investigación sobre los hechos.
Minutos después del tiroteo, el gobernador de Texas, Greg Abbott, a través de un comunicado expresó su solidaridad: “Nuestros corazones están con los afectados por el trágico tiroteo de hoy y con toda la comunidad de la iglesia Lakewood de Houston. Los lugares de culto son sagrados”.
También agregó que ha estado en contacto con funcionarios locales y estatales para “ayudar a la comunidad y ayudar a llevar justicia rápidamente al criminal que cometió este acto atroz”.
Paola Martínez Burgos