La directora de Sustitución de Cultivos de Uso Ilícito, Gloria Miranda Espitia, anunció que el programa en el Catatumbo va más allá de cambiar una mata por otra. El Gobierno nacional incluirá financiamiento para proyectos productivos, acompañamiento en la comercialización, acceso a vivienda y cupos universitarios para los campesinos que se sumen a la estrategia de erradicación de cultivos ilícitos.
“No es un subsidio, es un proyecto productivo”
Miranda enfatizó que la iniciativa del Gobierno no es un simple auxilio económico, sino un modelo sostenible que permitirá mejorar las condiciones de vida de las comunidades.
“Por instrucción del presidente Gustavo Petro, nosotros no solamente estamos hablando de un subsidio, que es lo que yo he intentado mencionar en varios espacios. Este programa no es un subsidio. Este programa tiene la oferta de un proyecto productivo de entre $15 y $20 millones, que luego de que ese proyecto productivo empiece a dar rendimientos va a ser muy rentable”, afirmó la funcionaria.
El plan gubernamental no solo busca erradicar cultivos ilícitos, sino transformar el territorio mediante el desarrollo de actividades económicas lícitas.
“Nosotros estamos ofreciendo a los que se vinculen al programa de sustitución un plan de mejoramiento de vivienda, carreteras, cupos universitarios. Entonces, realmente, el paquete de lo lícito es mucho más atractivo al final de cuentas”, señaló Miranda.
El objetivo es erradicar 25.000 hectáreas de hoja de coca en el Catatumbo. Para ello, se contempla un incentivo mensual de $1.280.000 por un año, mientras los cultivos de ciclo corto comienzan a dar sus primeros rendimientos o, en caso de tener cultivos previos, se les brinde apoyo en comercialización y transformación.
De la economía ilegal a la agroindustria
La estrategia del Gobierno busca generar valor agregado en los productos agrícolas para hacerlos competitivos.
“Recordemos que la coca por lo general se vende transformada en pasta base para agregarle más valor. Nosotros vamos a hacer lo mismo, pero con productos legales. Digamos, si tenemos cacao, pues vamos a transformarlo en chocolate o en algún otro producto para aumentar ganancias. Tenemos que también encargarnos de la logística de transporte”, explicó Miranda.
Asociatividad, clave para el éxito del plan
Miranda destacó que la organización de los campesinos en asociaciones productivas es fundamental para la sostenibilidad del programa.
“Yo no digo que sea una tarea fácil, pero lo estamos intentando hacer a través de las organizaciones productivas. Entonces, ya en el Catatumbo hoy hay asociaciones, por ejemplo, productoras de cacao que agremian esas cooperativas a cultivadores de coca y otros que no son cultivadores de coca”, indicó la funcionaria.
Además, aclaró que el Gobierno no quiere enviar un mensaje equivocado de que solo los cultivadores de coca recibirán apoyo. “Lo que se puede hacer, por ejemplo, es entregar una planta transformadora a esa asociación para que la administre y se vean beneficiados tanto los cultivadores de coca como los que no”, precisó.
Cinco pilares del plan de sustitución en el Catatumbo
La directora de Sustitución de Cultivos desglosó los cinco pilares que sostienen la estrategia del Gobierno:
Con este enfoque integral, el Gobierno busca hacer de la legalidad una opción viable y sostenible para los campesinos del Catatumbo, ofreciendo alternativas reales para dejar atrás los cultivos ilícitos y fortalecer la paz en la región.
humberto ‘Toto’ Torres