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Soñar sí…pero trabajando

Existe un adagio popular que dice: “Camarón que se duerme, se lo lleva la corriente”, este refrán, lo usamos para hacer reaccionar a aquellas personas que son demasiado inútiles, se refiere, también, a las consecuencias negativas de la pereza.

Esta expresión sigue siendo muy usada hoy en día, debido a que hay cantidad de personas que se rindieron, que se desanimaron, que dejaron de luchar por sus objetivos, y lamentablemente, se llenaron de pereza y negligencia, al punto que sus vidas, son un gran monumento al desperdicio y a la parálisis.

Dios siempre nos da oportunidades para triunfar y seguir adelante, esto significa que siempre debemos mantenernos atentos, o si no podemos perder lo que hemos conseguido. Es evidente que el que no sabe mantenerse pendiente de sus asuntos puede ver cómo estos se echan a perder.

Hay un versículo en la Biblia, que describe de manera muy jocosa a una persona perezosa, es ese tipo de personas, que tienen todo para triunfar, pero no hacen ni el mínimo esfuerzo para conseguir algo, todo les fatiga, todo les cansa, nada les gusta, ponen problemas por todo… Parece un chiste, pero es verdad.

Mete el perezoso su mano en el plato; se cansa de llevarla a su boca.

Proverbios 26:15

Las oportunidades siempre han estado, las posibilidades de triunfar son muchas, pero las actitudes negativas, el desgano y la pereza, le ganan la batalla a muchos.

En el barbecho de los pobres hay mucho pan; más se pierde por falta de juicio.

Proverbios 13:23

Según el diccionario, la pereza se define como falta de ganas de trabajar o de hacer cosas, también es la debilidad o lentitud en el movimiento. Una falta de disposición a la hora de realizar determinadas tareas o actividades que suele ir ligada a la falta de motivación, a la poca claridad en los objetivos o a la inexistencia de resultados.

Como dicen por ahí: La pereza anda tan despacio, que la pobreza la alcanza.

Dios siempre nos llama a que seamos esforzados y valientes, a que enfrentemos las batallas con vigor, con ánimo y con la certeza que veremos buenos resultados, es por esta razón, que nos motiva con su Palabra para que nos movamos y salgamos de tanta parsimonia y lentitud que nos pueden llevar al fracaso y tristemente, a nuestras familias también.

Por lo cual dice: Despiértate, tú que duermes, y levántate de los muertos, y te alumbrará Cristo.

Efesios 5:14

Y como si fuera poco, Dios nos insta a que miremos y aprendamos de las hormigas, que son trabajadoras, laboriosas y precavidas. Como dicen por ahí: “Más claro no canta el gallo”.

Ve a la hormiga, oh perezoso, mira sus caminos, y sé sabio;
La cual no teniendo capitán, ni gobernador, ni señor,
Prepara en el verano su comida, y recoge en el tiempo de la siega su mantenimiento.

Proverbios 6:6-8

Escrito por Édgar Jaimes