Primero, la soledad no deseada. El abrumador porcentaje de quienes están aislados obliga a crear redes de apoyo, a compartir viviendas, a fomentar planes institucionales y no gubernamentales de convivencia.
Segundo, el maltrato. La vejez está siendo interpretada con desprecio por una capa de población ensimismada en el éxito rápido y la vigorexia.
Hijos crueles que someten a sus padres a segregación, tratos degradantes, o chantaje y manipulación emocional mediante el desconocimiento, la ausencia y la angustia.
Un filme turco, como “Festival de trovadores”, de Özcan Alper ( 2022 ), o la clásica italiana “Stanno tutti bene”, de Giuseppe Tornatore ( 1990 ), muestran las diferentes facetas tanto de la violencia estructural y cultural, como de la compasión y la reconciliación tardía.
Tercero, el de la salud mental : depresión, ansiedad, trastornos del sueño y alimenticios, todo ello ante los desafíos adaptativos del mundo actual : emergencias sanitarias, crisis políticas, incertidumbre pensional y violencia generalizada.
Cuarto, el de la salud física por fallas y costos en la cobertura de los sistemas asistenciales, discriminación implícita y marginamiento humillante.
Es cierto que hallazgos farmacológicos recientes en relación con la proteína beta amiloide pueden impactar positivamente la lucha ( preventiva ) contra el Alzheimer, pero enfermedades como esta siguen generando traumas profundos en entornos familiares y grupales.
Y quinto, para no ir más lejos, el principal problema de todos : el de la autoexclusión, la autocensura y la propia marginación.
Asumiéndose como inútil y prescindible, la persona de edad avanzada cae por inercia en el mutismo intelectual, el aislamiento, la melancolía y la acritud.
Es por eso que nada remplaza al emprendimiento, la motivación y la apertura mental a la aventura constructiva.
Empezando por conocer mejor y a fondo la realidad que supone la vejez y su enorme trascendencia, es decir, empaparse de iniciativas como las que promueve una entidad como la OPS.
Porque de acuerdo con la definición de la Organización Panamericana de la Salud, « el envejecimiento saludable es un proceso continuo de optimización de oportunidades para mantener y mejorar la salud física y mental, la independencia y la calidad de vida a lo largo de la existencia ».
Y nada más constructivo para un adulto mayor que empaparse, participar y expandir ideas como la de la Década del Envejecimiento Saludable ( 2020 - 2030 ).
Una idea abarcadora que, precisamente, contempla « luchar contra la discriminación de la edad, lograr entornos amigables hacia las personas mayores, la alineación de los sistemas de salud de manera que respondan a las necesidades de este sector de la población, y los cuidados a largo plazo ».
vicentetorrijos.com