En medio de la crisis social, política y ambiental que atraviesa el planeta nace un movimiento para cultivar conciencia global colectiva, basado en el amor y el respeto por los recursos naturales.
Liderado por la fundación Saving The Amazon, este movimiento reunirá a millones de personas comprometidas con la defensa del medio ambiente y la justicia social, para construcción un mundo más verde y equitativo, a partir del amor, el diálogo, la divulgación de información veraz, la participación activa y el autoconocimiento.
Enmarcado en la obra misional de esta ONG, dedicada a la conservación del bosque Amazónico, este movimiento de activismo climático se desarrolló, desde el 15 de mayo, y se hará todos los sábados a las 9 de la mañana, contando con la participación de miles de personas de los cinco continentes.
El ‘Movimiento’ que reúne los cinco ejes de acción de Saving The Amazon: sostenibilidad, políticas climáticas internacionales, acceso a la información, protección a la biodiversidad y justicia social, encontró en la meditación una herramienta eficaz para transformar el entorno y la cultura.
“La idea es que cada persona del mundo se siente al frente de la institución climática de su pueblo o ciudad y haga una sesión de meditación por 15 minutos, como un símbolo hacia todos los sectores de la humanidad de la construcción de una conciencia planetaria, en la que todos estamos construyendo desde nuestros hogares una nueva humanidad”, explicó su director Daniel Gutiérrez, quien meditará frente al Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible.
Bajo la tesis de que el amor es mucho más fuerte que el odio, Daniel Gutiérrez se ha propuesto cultivar un movimiento climático basado en conectar al mundo entero desde una unión si se quiere “espiritual”, que logre los cambios que el planeta necesita.