El debate sobre la reforma a la salud en la Cámara de Representantes se suspendió tras dos días de sesiones extraordinarias en el Congreso, dejando para el próximo año la discusión de los temas más polémicos. De los 62 artículos que componen la ponencia, solo 24 fueron aprobados, lo que representa menos de la mitad del proyecto.
La decisión de aplazar el debate fue resultado de un acuerdo entre el presidente de la Cámara, Jaime Raúl Salamanca, y los ministros de Salud e Interior, Guillermo Alfonso Jaramillo y Juan Fernando Cristo. Según anunciaron, las sesiones extraordinarias, inicialmente programadas hasta el 19 de diciembre, se levantaron para retomar la discusión en febrero de 2025.
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Avances parciales en medio de tensiones
Entre los artículos aprobados destacan aquellos que regulan la conformación del Consejo Nacional de Salud, la metodología para calcular la Unidad de Pago por Capitación (UPC), y disposiciones sobre la designación de directores de hospitales públicos y garantías laborales para los trabajadores de las IPS públicas y privadas.
Sin embargo, los aspectos más sensibles de la reforma, como la autonomía de los entes territoriales y el monto definitivo de la UPC, quedaron aplazados, al igual que más de 600 proposiciones presentadas por los congresistas.
La jornada estuvo marcada por tensiones, particularmente cuando la representante Katherine Miranda, de la Alianza Verde, solicitó profundizar en las proposiciones relacionadas con los primeros ocho artículos. Su petición fue negada por el presidente Salamanca, lo que derivó en un acalorado intercambio en el que Miranda fue suspendida del uso de la palabra.
Posiciones del Gobierno y el Congreso
El ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, reconoció el avance logrado: “En febrero volveremos a la discusión de la parte que queda en la reforma, pero sin duda alguna es un éxito de esta Cámara de Representantes”. También destacó que “muchas de las inquietudes de los actores fueron recogidas, aunque no todas, algo natural en un debate democrático”.
Cristo defendió la necesidad de la reforma al señalar que “el sistema de salud en Colombia ha venido sufriendo problemas graves desde hace más de una década, y el Gobierno busca una solución de fondo”.
Qué sigue para la reforma
La decisión de aplazar el debate permitirá a los congresistas analizar con mayor profundidad los aspectos más controvertidos. Según los líderes del Congreso, se buscará mayor consenso entre las bancadas, aunque Cristo advirtió que “hay partidos que no quieren una reforma”.
El próximo periodo legislativo definirá el futuro de esta reforma, una de las iniciativas más importantes para el Gobierno de Gustavo Petro, en medio de un panorama político dividido y de altas expectativas ciudadanas.
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Humberto ‘Toto’ Torres