José Ismael Peña, rector de la Universidad Nacional (UNAL), solicitó a la Procuraduría, la Contraloría y la Fiscalía General de la Nación, que realicen un acompañamiento “urgente” por la presencia de una presunta red de corrupción que estaría afectando la institución educativa.
En una carta de dos páginas publicada en su cuenta de X, la cual va dirigida a los encargados de las entidades mencionadas, el rector señala que la UNAL “está en grave peligro de ver destruida su reputación y la de muchas y muchos de los excelentes académicos que allí forman y se forman”.
Basándose en la publicación que realizó la revista Cambio, titulada “Los millonarios negocios en la Universidad Nacional que varios directivos han monopolizado”, en el cual indica que hay irregularidades en el manejo de recursos públicos dentro de la universidad, Peña manifiesta su preocupación de que sea cierto que sí exista esa presunta red de corrupción y que es necesario una rápida intervención.
De acuerdo con el profesor, la Unidad de Reacción Inmediata (URI) de la Contraloría General de la República, tiene la competencia de implementar de manera inmediata y eficaz, las “acciones de vigilancia y control fiscal a los recursos, fondos, bienes o intereses patrimoniales de naturaleza pública que puedan encontrarse en riesgo de inminente pérdida”.
En este sentido, José Ismael Peña reitera la solicitud para que las entidades se dirijan a las corporaciones vinculadas a la Universidad que ellos consideren pertinentes, principalmente a Rotorr-Motor de Innovación, el Instituto de Liderazgo Público y el Fondo de Apoyo Estudiantil.
Finalmente, peña expresa que “la implementación del control preventivo y concomitante es urgente para salvaguardar el buen nombre de la Universidad Nacional y los recursos públicos”, y asimismo, para que se evidencie cualquier acto que atente en contra “el erario público e incidencias de tipo disciplinario o penal”.
Dayineth Molina Velásquez