El lunes 7 de octubre, un grupo de personas llevó a cabo un plantón a favor del Estado palestino, tras un año de que el grupo terrorista Hamás iniciara la guerra. Sin embargo, el orden se salió de control cuando varias personas intentaron ingresar a la sede de la embajada de Estados Unidos en Bogotá.
Las movilizaciones iniciaron de manera pacífica a las 3:00 p.m. en la Universidad Nacional; la Universidad Pedagógica; la embajada del Líbano, Israel y Estados Unidos. Posteriormente, unos encapuchados empezaron a violentar las rejas del recinto diplomático, ubicado en la zona de Quinta Paredes, lo que conllevó a que la Policía Metropolitana desplegara la Unidad de Diálogo y Mantenimiento del Orden (Undmo) para controlar la situación.
Dos horas más tarde, los protestantes rompieron vidrios y vandalizaron comercios y edificaciones públicas, como sucedió en la fachada de la alcaldía local de Chapinero, quienes rechazaron los hechos a través de sus redes sociales: “Rechazamos todas las formas de violencia y conflicto armado en el mundo. Apoyamos las manifestaciones pacíficas por la paz, pero también decimos NO al daño de nuestros espacios públicos”, escribieron en su cuenta de X.
El Distrito instaló un Puesto de Mando Unificado (PMU) e informó que aproximadamente 20 locales comerciales fueron afectados con grafitis y tintas. Además, se presentó una agresión al vigilante de una empresa privada. A las 6:00 p.m., reportaron que más de 220 personas llegaron a la embajada de Palestina, donde continuaron dañando locales comerciales. También encendieron fuego a papeles y muñecos en memoria de las víctimas del conflicto.
Con el paso del tiempo, la situación se tornó más intensa cuando los manifestantes, con una bandera gigante, bloquearon la calle 26. Este acto hizo que Transmilenio cerrara la estación Universidad Nacional y desviara sus servicios. Incluso, atacaron un taxi en medio de la protesta, lo que agravó el caos en la zona. Al concluir la jornada, varios manifestantes se quedaron en el lugar hasta restablecer la movilidad a mediados de las 10 de la noche y resaltaron que estas marchas podrían volver a presentarse.
El embajador de Palestina en Colombia, Raouf Almalki, extendió su agradecimiento a los asistentes por su apoyo y pidió paz para detener las muertes de civiles en la región.
Dayineth Molina Velásquez