El exjefe paramilitar y promotor de la paz, Salvatore Mancuso, ha propuesto la creación de Mesas de Paz en respuesta a las intimidaciones sufridas por los habitantes de una vereda en Tierralta, Córdoba. En una carta firmada, Mancuso expresó su condena a estos actos de agresión y llamó a la apertura de diálogos políticos con las organizaciones que operan en la zona.
En el comunicado, Mancuso declaró: “lamento y condeno enérgicamente los recientes actos de agresión contra la población perpetrados en Santa Isabel del Manso, en Tierralta, sur de Córdoba. La violencia contra nuestros campesinos, venga de donde provenga, es inaceptable y merece toda nuestra repulsa y solidaridad”.
El exjefe paramilitar enfatizó la necesidad de buscar vías negociadas y privilegiar el diálogo político para desentrañar las raíces del conflicto, desmantelar los factores que lo perpetúan y desmontar los órdenes sociales que han sido instaurados. Además, hizo un llamado a la Defensoría del Pueblo, ONGs de Derechos Humanos y organismos multilaterales como la OEA y la ONU para que implementen un sistema conjunto de alertas tempranas, acompañado de comités de verificación.
Mancuso subrayó la importancia de la participación activa de las poblaciones campesinas afectadas en estos mecanismos, reconociendo que sus voces y experiencias son esenciales para alcanzar una solución justa y duradera. Las intimidaciones en Tierralta se viralizaron en redes sociales a través de videos grabados por los mismos campesinos, quienes denunciaron la presencia de hombres armados en la región.
El fiscal general, Francisco Barbosa, anunció que se citará a interrogatorio a 30 soldados, dos suboficiales y un oficial que forman parte de la brigada con jurisdicción en la vereda Bocas de Remanso, donde ocurrieron estos incidentes. Barbosa enfatizó que no se puede permitir un retorno a las épocas del paramilitarismo, tal como lo expresó el presidente Gustavo Petro.