Presidente de la Confederación de Padres de Familia aseguró que, los afectados con la decisión de volver a clases serán los estudiantes

El pasado lunes, la alcaldesa de Bogotá Claudia López, anunció el regreso a las aulas de jardines, colegios y universidades de la ciudad, con horarios de 4 horas y la implementación de todos los protocolos de bioseguridad para los niños y jóvenes que vuelvan a las clases. 

Por su parte, Carlos Ballesteros presidente de la Confederación colombiana de padres de familia, manifestó que, son solo comunicaciones porque la realidad de la ciudad es diferente y son los niños y jóvenes los que se van a ver más perjudicados con esta decisión. 

“Tenemos fotografías de los últimos dos meses, donde los padres de familia nos han enviado las denuncias demostrando que no hay baterías sanitarias y las que hay están en un mal estado y es entendible porque la industria de la construcción estaba sin poder trabajar” precisó Ballesteros.

Asimismo, aseguró que, la mayoría de instituciones académicas de Bogotá no tienen suficientes lavamanos para los estudiantes, ni las enfermerías tienen los equipamientos necesarios para atender un eventual contagio “y mucho menos de hacer un aislamiento práctico”.

“El tema de alimentación y transporte escolar no están coordinados, no se ha concertado sobre todo con los padres de familia. No es cierto que nos hayamos reunido con la secretaría de educación, ni con la alcaldesa, hemos tenido un espacio de tres minutos con una concejal de la ciudad, pero no hemos tenido una reunión con el Gobierno Local para hacer las recomendaciones, basados en la experiencia” indicó el presidente del Comité de padres de familia. 

Además, aseguró que según encuestas nacionales que la confederación ha realizado, al igual que las encuestas de Fecode, demuestran que el 80% de los padres de familia piensan en no enviar a sus hijos a las aulas por este año.

“Yo hago la recomendación a los padres de familia, a la comunidad y a la administración local, que quien asuma el reto de volver a la presencialidad, que asuma el reto y el riesgo de contagios que eventualmente pueda pasar. Aquí está en riesgo la vida y la integridad de los estudiantes” expresó Ballesteros en diálogo con Colmundo