Este martes, durante el acto protocolario de firma del Memorando de Entendimiento entre la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) y la Agencia para la Reincorporación y la Normalización (ARN), el presidente Gustavo Petro anunció que acudirá al Consejo de Seguridad de la ONU para denunciar los reiterados incumplimientos del Estado colombiano en la implementación del acuerdo de paz suscrito con las FARC en 2016.
“Iré al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas en calidad de jefe de Estado para exponer la verdad: que fue el Estado colombiano, no el presidente, quien incumplió el acuerdo de paz con las extintas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia y, en consecuencia, quebrantó un compromiso con la humanidad asumido en 2016”, declaró el mandatario.
Petro advirtió que detrás de ese incumplimiento “hay temor a la verdad. Pero no por parte nuestra, sino de los criminales que asesinaron al pueblo colombiano. Por eso están intentando fragmentarla. Es necesario que el Consejo de Seguridad conozca esta realidad, pues se está vulnerando el compromiso internacional asumido ante ese organismo por el entonces presidente Juan Manuel Santos”.
El jefe de Estado insistió en que lo pactado en 2016 constituye “una declaración unilateral del Estado que trasciende la Constitución colombiana y que nos obliga ante una especie de constitución de la humanidad”.
Según explicó, ese compromiso fue elevado ante la máxima instancia de poder global, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, donde se sientan las principales potencias del mundo. No obstante, aseguró que se están incumpliendo puntos clave como la reforma agraria, la restitución de territorios históricamente excluidos y el desmonte de la violencia.
Sobre los asesinatos de excombatientes desmovilizados, Petro señaló que “los responsables son organizaciones narcotraficantes emergentes, dirigidas por capos albaneses, croatas y mexicanos, cuyo centro de operaciones se encuentra en Dubái, Emiratos Árabes Unidos, y no en Bogotá”.
El presidente también denunció la infiltración de estas mafias en instituciones del Estado: “se han apropiado de instituciones de la Policía, de instituciones del Ejército; están metidas dentro del Congreso de la República, y nos infiltran incluso en este palacio, una y otra vez”.
Si bien reconoció avances que la canciller Laura Sarabia ha presentado ante la ONU, subrayó que aún existen “enormes vacíos que impiden afirmar que el Estado colombiano está cumpliendo con lo pactado en 2016 y, en consecuencia, está fallándole a la humanidad en su declaración unilateral de Estado”.
Paola Martínez Burgos