El presidente Gustavo Petro sigue defendiendo su propuesta de una asamblea nacional constituyente, luego de que diversos personajes del sector de la política han señalado que lo que está buscando el mandatario es perpetuarse en el poder.
Esta vez, el jefe de Estado ha respondido a los comentarios del excomisionado de paz Sergio Jaramillo, quien expresó que tanto Petro como el excanciller Álvaro Leyva tienen una interpretación errada sobre el acuerdo de paz firmado en el 2016. “Usar el acuerdo de paz con las Farc para convocar una constituyente es un absurdo, esa fue precisamente una de las líneas rojas que mantuvimos en la negociación”, dijo Jaramillo.
En su defensa, a través de su red social X, el gobernante de la Nación inicialmente hizo una comparación del uso del “fast track”, un mecanismo que permite aprobar rápidamente en el Congreso las reformas pactadas y que nació con la implementación de los acuerdos de paz en el gobierno de Juan Manuel Santos.
Según Petro, en ese entonces “no se presentaron las reformas claves pactadas en el acuerdo: la reforma agraria, la transformación del territorio y la verdad judicial”, y que de igual manera “pasó lo mismo con el acuerdo M19, que viví: no se aplicó la constitución del 91, ni se construyó el estado social de derecho; en el de las Farc, que ahora vivo como gobernante, no se presentaron las reformas que necesitaba”, añadió.
En este sentido, el presidente resalta que este es el momento en el que “el Congreso puede asumir un rol histórico”, ya que en su opinión, “le corresponde ya al poder constituyente del pueblo el hacerlo; también está en discusión cual puede ser el medio para hacerlo: una asamblea constituyente solo es un medio de varios para expresar el poder constituyente”, manifestó.
Seguidamente, continuó reiterando que “el papel histórico del Congreso hoy, es tramitar su convocatoria, si no, el poder constituyente, tarde que temprano, lo hará”, y agregó que, “un poder constituído jamás llegará a un perdón social general. Eso es solo el atributo del poder constituyente: el poder del pueblo”.
Por consiguiente, Petro sigue recalcando que está la oportunidad de hacer un cambio, ya que mientras “el mundo habla de guerra, Colombia habla de paz y puede hacer que el mundo hable de paz”.
Finalizando su mensaje, el presidente menciona que Jaramillo y Santos están atacando su propuesta, y que dicho ataque se une a la del expresidente Álvaro Uribe, lo que viene siendo “una forma de hablar de paz”.
“Aunque mis propuestas mueven las aguas y producen a veces, tormentas en un “statu quo” que muere en la inercia de los privilegios, las exclusiones y las desigualdades de la mayor parte de su sociedad, hemos logrado que este gobierno ponga a hablar a la sociedad colombiana de Paz y Democracia. La palabra tiene poder. Palabra que sí”, sentenció.
Dayineth Molina Velásquez