Las persistentes lluvias que azotan Cartagena en los últimos días han dejado a su paso una estela de desolación y angustia para los habitantes de los Cerros de Albornoz, específicamente en el sector 11 de Marzo. En medio de la inclemencia del clima, las calles se han convertido en verdaderos ríos, obstaculizando el tránsito y sumiendo a los residentes en una situación de emergencia.
Los vecinos de esta comunidad enfrentan una dura realidad, marcada por el estancamiento del agua en las vías y el ingreso indeseado del líquido a sus hogares. Desde hace días, la tubería principal se encuentra obstruida, impidiendo el flujo normal del agua de lluvia y provocando graves consecuencias para la población local.
Las imágenes captadas por los residentes muestran calles convertidas en auténticas piscinas improvisadas, con el agua alcanzando niveles preocupantes. Este escenario no solo dificulta la movilidad de los habitantes, sino que también expone sus viviendas a inundaciones catastróficas, con muebles y electrodomésticos dañados y la amenaza latente de enfermedades transmitidas por mosquitos.
Según testimonios de los líderes comunitarios, la situación se ha vuelto insostenible, con el agua acumulada en las calles persistiendo durante más de quince días. Ante este panorama desolador, la comunidad del sector 11 de Marzo de los Cerros de Albornoz hace un llamado desesperado a las autoridades competentes para que intervengan de manera urgente y brinden asistencia a quienes se encuentran afectados por esta crisis.
“Estamos viviendo una pesadilla constante. Cada vez que llueve, nuestras calles se convierten en ríos y nuestras casas en embalses. Necesitamos ayuda, necesitamos que se despeje la tubería y se tomen medidas para evitar que esto vuelva a ocurrir”, expresó uno de los residentes afectados.
En medio del desasosiego y la incertidumbre, la comunidad de los Cerros de Albornoz clama por soluciones concretas y efectivas para poner fin a esta situación que pone en peligro su seguridad y bienestar. La colaboración entre autoridades locales y ciudadanos se presenta como un imperativo para afrontar esta emergencia y restablecer la normalidad en esta zona afectada por las inclemencias del tiempo.
Saray Vargas López