El pasado 7 de septiembre, durante una alocución presidencial, el jefe de Estado Gustavo Petro reveló que de Colombia habría salido dinero en efectivo, puntualmente USD 11 millones, para adquirir el software ‘Pegasus’ durante el gobierno de Iván Duque, a través de la Dirección de Inteligencia Policial.
Asimismo, el presidente Petro, a través de su cuenta oficial de X, argumentó: “La entidad oficial del gobierno de Israel para lavado de activos efectivamente constata que en un avión, en junio de 2021, se enviaron cinco millones y medio de dólares a Tel Aviv y fueron, después de ser registrados en la aduana israelí, consignados en un banco que puso la alarma a IMPA por sospechar su origen ilícito”.
Además, señaló: “La agencia oficial IMPA dice que la transacción fue entre la Policía Nacional de Colombia y NSO en Israel”.
En ese mismo sentido, el periodista israelí Gur Megiddo, quien ha investigado el uso de este software, escribió en su cuenta de X: “NSO (Group Technologies Limited) vendió Pegasus a una autoridad del gobierno colombiano en 2021 y recibió 13 millones de dólares en efectivo enviados a Israel en un jet privado. Un alto funcionario del Ministerio de Defensa respaldó el acuerdo, ayudando a persuadir a un banco a depositar el efectivo a pesar de las preocupaciones de lavado de dinero”.
Asimismo, otros periodistas como el mexicano Pedro Miguel, del medio “La Jornada”, han revelado que “Pegasus”, el software ilegal presuntamente comprado por el gobierno de Iván Duque, ya ha sido utilizado por otros Estados latinoamericanos.
En una entrevista para RTVC, indicó que, al parecer, el uso de este programa se dio por parte del gobierno de Enrique Peña Nieto para espiar la campaña electoral de Andrés Manuel López Obrador.
Además, reveló que en su país no se ha podido identificar a los responsables ante la justicia: “El problema es que en México no se ha podido encontrar evidencia en las instancias gubernamentales de instalaciones de Pegasus. No obstante, la Fiscalía General de la Nación halló una red de corporaciones privadas y fantasmas que son las receptoras de esta información”.
El periodista mexicano también explicó que “Claro, el software lo pueden poseer golpistas o narcos; hasta gobiernos extranjeros o grupos ilegales que estarían interviniendo de forma ilegal en asuntos internos de otros países”.
Dado que en el caso de Colombia las denuncias apuntan a que supuestamente fue utilizado para llevar a cabo seguimientos ilegales a magistrados y empleados de las altas cortes del país, tanto la Fiscalía como la Procuraduría han iniciado investigaciones.
Paola Martínez Burgos