Una patrullera de la Policía Nacional, identificada como María Alejandra Vieda Almario, de 23 años, fue asesinada este miércoles tras un ataque con ráfagas de fusil contra la estación de Valdivia, Antioquia, presuntamente perpetrado por el ELN. El ataque ocurrió en la madrugada, cuando al menos cuatro hombres armados dispararon contra el puesto policial, hiriendo de gravedad a la uniformada, quien falleció minutos después al ser trasladada al Hospital San Juan de Dios en Yarumal.
“En medio del hostigamiento, la patrullera resultó gravemente herida y falleció debido a la gravedad de sus lesiones”, confirmaron las autoridades. Tras el ataque, se encontró un artefacto explosivo junto a una bandera del ELN cerca del parque principal del municipio, lo que reforzaría la autoría del grupo guerrillero. Unidades del Ejército se desplazaron para realizar una detonación controlada del explosivo, mientras la zona permanece en máxima alerta.
Valdivia vive una creciente ola de violencia por la disputa territorial entre el ELN, las disidencias de las FARC y el Clan del Golfo. Solo en las últimas semanas, el Ejército desactivó tres explosivos destinados a atentar contra civiles y militares, mientras más de 200 personas fueron desplazadas de las veredas La Llana y Raudal Viejo debido a los enfrentamientos.
Este crimen se suma a la escalada de ataques en Colombia tras el atentado contra el senador Miguel Uribe Turbay, con episodios violentos también en Valle del Cauca y Cauca. Las autoridades mantienen operativos activos para capturar a los responsables y evitar nuevos ataques, mientras el país exige respuestas ante la crisis de seguridad.
La muerte de la patrullera Vieda Almario enciende las alarmas sobre el recrudecimiento del conflicto en zonas históricamente afectadas por grupos armados, donde la población civil sigue pagando el precio más alto.
Humberto ‘Toto’ Torres