De otra parte, la capital colombiana supera ampliamente la brecha de conexión.
El país actualmente no posee conectividad total en zonas apartadas. Según el informe de seguimiento de la tenencia y uso de las TIC del Departamento Administrativo Nacional de Estadística – DANE, reveló que durante el 2022, el 59,5% de los hogares tenía conexión a internet a nivel nacional; 67,5% en las cabeceras y 32,2% en centros poblados y áreas rurales dispersas.
Es decir, que 4 de cada diez hogares en Colombia aún no tienen conexión a internet, una cifra que aumenta a siete de cada diez en los centros poblados y áreas rurales dispersas.
Bogotá sigue siendo la región con mayor proporción de hogares que tienen el servicio de internet, con 79,4%. Después le sigue el Valle del Cauca con 73%; Quindío con 69,8% y Santander con 64,6%.
De otra parte, Vaupés lidera el listado de los departamentos con menos hogares con conexión a internet, con 4,1%, seguido de Vichada con 10,2% y Guainía con 18%.
Lo que quiere decir es que el Internet rural en Colombia aún no cumple con la meta de digitalización y conectividad establecida por el ejecutivo. A pesar de los avances en la digitalización, el país se ubica por debajo de otros en cuanto a conectividad.
La brecha digital entre las áreas urbanas y rurales sucede principalmente por factores económicos, geográficos y de infraestructura.
Entre tanto, desde el Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones – MinTIC, se trabaja en el proyecto “Conectividad y Tecnología para Cambiar la Vida”, el cual establece tres ejes estratégicos: Conectividad, Tecnología que Transforma y Educación Digital. Además, la meta del gobierno será capacitar a un millón de personas.
Juan Camilo Joya