La Organización Deportiva Panamericana (Panam Sports) ha despojado a Barranquilla, Colombia, de la codiciada sede de los XX Juegos Panamericanos, fijados para el año 2027. Esta determinación ha detonado una ola de conmoción en ámbitos políticos y económicos.
El senador David Luna ha alzado la voz, proclamando la necesidad de una moción de censura contra la ministra del Deporte, Astrid Rodríguez. Luna enfatiza que es crucial asumir la responsabilidad política ante esta pérdida para la nación y la ciudad de Barranquilla.
La ministra Rodríguez, por su parte, ha defendido la posición del Gobierno, asegurando un compromiso total para la realización de los juegos. Afirmó que existía un acuerdo previo para realizar los pagos correspondientes en enero, mencionando un acuerdo de pago con el presidente de Panam Sports, Neven Ilic.
No obstante, las acusaciones de Luna señalan una discrepancia entre lo prometido y lo ejecutado. El senador insiste en que la vergüenza internacional experimentada por Colombia y Barranquilla es resultado de una supuesta negligencia administrativa.
La Ministra ha hecho hincapié en la asignación de recursos específicos para cumplir con los compromisos deportivos en la Ley 2342 del presupuesto de rentas y recursos de capital para el año 2024. Sin embargo, estas afirmaciones no han logrado disipar las dudas sobre la gestión de los fondos destinados a los juegos.
Con estas acusaciones, Luna reitera su intención de presentar una moción de censura, destacando la responsabilidad política que recae sobre la ministra Rodríguez. Insiste en la necesidad de que esta última abandone su cargo, enfatizando el descontento generalizado por la falta de cumplimiento de compromisos.
El panorama político y deportivo se encuentra tenso ante esta situación, dejando en entredicho la eficacia administrativa y la transparencia en la gestión de los fondos designados para eventos de envergadura internacional como los Juegos Panamericanos.
Humberto ‘Toto’ Torres