El conjunto ‘Verdolaga’ hizo todo para ganar, pero no definió y terminó pagando caro el precio, pues en el epílogo del compromiso Radamel Falcao García aprovechó un penal polémico y le dio el punto que puede significar el pase a la final para Millonarios.
Mucha intensidad, fuerza, empuje y pujanza, son los términos que podrían describir a un Atlético Nacional que tuvo un primer tiempo deportivamente destacado, en el cual ofensivamente le pasó por encima a Millonarios. Desde la oficialización de la nómina titular, Nacional ya daba muestras de lo que intentaría disponer en el terreno de juego. El mexicano Efraín Juárez arriesgó alineando a Dairon Asprilla como lateral derecho, un jugador con características más ofensivas, cuya posición primaria es como extremo y su ubicación secundaria como delantero. El oriundo de Istmina fue una apuesta de Juárez, teniendo en cuenta que los reemplazantes naturales de Román eran Samuel Velásquez y Joan Castro. Asprilla, de manera improvisada a lo largo del partido, terminó cumpliendo, pero significó para Nacional jugar con un hombre menos en defensa, lo que derivó en que Jorman Campuzano tuviera que doblegarse para revelarlo y apoyarlo.
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Muy rápido se fue arriba Nacional, que salió arropado por un estadio Atanasio Girardot abarrotado a llevarse por delante a Millonarios. El conjunto bogotano, en los primeros minutos, intentó posicionar un bloque medio alto con dos finalidades: pelear el partido más alto, no en campo propio, e intentar contraatacar a Nacional, que daba espacios con la salida de sus extremos y laterales. Álvaro Angulo, uno de los puntos altos individualmente, a pura potencia y velocidad, se inventó una jugada que parecía no tener mayor peligro, se deshizo de la noble marca de Millonarios y posteriormente aprovechó un rebote un poco sucio, le quedó picando la pelota para colgarla en el ángulo y poner a ganar a Nacional a los 9 minutos de juego.
Posteriormente, Nacional mermó un poco la intensidad. Millonarios, sin ser efectivo y preciso, fue estableciéndose en la gramilla y ganando confianza, señales de lo que vendría en el segundo tiempo. Infinidad de ventajas por afuera dio el ‘Embajador’, quien jugó sin extremos naturales. Marino Hinestroza y Alfredo Morelos aprovecharon y tuvieron dos mano a mano, en los cuales salió victorioso Álvaro Montero, quien demostró por qué es portero de selección. Su gran actuación le permitió a Millonarios, que poco y nada generó en la primera mitad, salir vivo de los primeros 45 minutos y ya con otra disposición cambiar el rumbo del partido en la segunda mitad.
Gamero corrige y el replanteo le permite crecer a Millonarios
El 5-3-2 de Millonarios en la primera mitad, desdibujado por Atlético Nacional, encontró varios puntos bajos en el ‘Embajador’ que le hicieron más fáciles las cosas al conjunto ‘Verdolaga’. El jugar sin extremos naturales permitió que Ángulo y Asprilla fueran dos extremos más, pues Millonarios no tenía salida por las bandas. Por dentro, David Macalister Silva, Juan Carlos Pereira y Stiven Vega fueron superados físicamente por los volantes e interiores de Nacional. Hubo poco espacio por dentro, pero muchas ventajas en cuanto a posesión y poca generación del ‘Embajador’. La deficiencia en todas sus líneas llevó a que Leonardo Castro pasara casi desapercibido en el primer tiempo, y en 35 minutos solo hubiera tocado una vez la pelota.
Para la segunda mitad, al cambio actitudinal se sumó el volver al 4-4-2, con el ingreso de Jader Valencia, lo que disminuyó la salida constante de Ángulo. El ingreso de Falcao García le dio a Millonarios amplitud de espacios, pues Falcao, con su técnica, arrastra marcas y libera áreas en terreno contrario. Así mismo, Millonarios creció con la pelota. Sin hacer daño, le bajó la intensidad a Nacional, manteniéndole la pelota, lo fue metiendo en un embudo y obligándolo a correr, meter y jugar largo, lo cual derivó en imprecisiones o en quedar en inferioridad numérica.
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Minuto 79: el VAR se equivoca groseramente y Millonarios empató el juego
Millonarios, a su ritmo, en medio de su escasez, pero con inteligencia para adaptarse a las condiciones del partido, una de sus mayores virtudes, consiguió una pelota quieta que terminaría derivando en la que podría ser la gran polémica del año en el fútbol colombiano. Según el reglamento y los ángulos que se tienen de la jugada, se evidencian la penosa equivocación de Nicolás Gallo, encargado del VAR, y su equipo de trabajo.
En primera instancia, el central Carlos Betancur señaliza un penal a favor de Millonarios, penalización que parecía clara, pues el central verdolaga Felipe Aguirre, en una acción algo torpe y poco técnica, toca por detrás a Falcao García, desequilibrándolo y cortando su carrera y perfilamiento para disparar. Inmediatamente, salen otros ángulos de la acción y se analiza, desde el punto de partida, el cobro de pelota quieta. Se denota una anomalía en la posición de Falcao García, quien termina siendo el jugador afectado en el área.
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La imagen evidencia que el hombro de Falcao García está por delante de la línea de defensas, posición ilegítima según el reglamento. “Un jugador estará en fuera de juego si: cualquiera parte de su cabeza, cuerpo o pies se halla más cerca de la línea de meta contraria que el balón y el penúltimo adversario”, dice el artículo 11.2 de la IFAB.
Así mismo, es importante aclarar que, sin conocer los audios del VAR, no existe fundamento para validar la acción previa a la falta que termina en el empate de Millonarios. Falcao García está en la misma línea del brazo de Felipe Aguirre y, según el reglamento, las manos y brazos no habilitan. “No se tendrán en consideración las manos ni los brazos de los jugadores, incluidos los de los guardametas”, afirma el artículo 11.2 de la IFAB.
Finalmente, luego de casi 10 minutos revisando la acción, Carlos Betancur, asesorado por el VAR Nicolás Gallo y el AVAR Juan Pablo Alba, decide mantenerse en su posición y pitar penal. Falcao se hace cargo para el definitivo 1-1, que le permite a Millonarios sacar un punto de oro en Medellín y mantener la ventaja de 3 unidades sobre su rival directo.
En conferencia de prensa, Efraín Juárez, acompañado por los líderes de camerino, denunció la acción y actuación de la terna arbitral, que terminó influyendo en el marcador. “En el fútbol, a veces te dan y a veces te quitan. Hoy nos han quitado.”
Alexander Cortes