Después de 15 días de concentración en la Plaza de Bolívar, comunidades campesinas de la Amazonía, Orinoquía y el sur de Colombia levantaron su protesta tras alcanzar un acuerdo con el Gobierno nacional. Las negociaciones, mediadas por el Ministerio del Interior y la Defensoría del Pueblo, permitieron establecer compromisos concretos para abordar el abandono histórico en estas regiones.
Los cuatro pilares del acuerdo
Gabriel Rondón, viceministro del Interior, detalló los acuerdos logrados: “Uno, emitiremos un acto administrativo que dará seguimiento jurídico a la mesa de concertación. Dos, garantizaremos el retorno seguro a sus territorios. Tres, en Bogotá se quedará un grupo pequeño de 10 personas para trabajar con los ministerios en políticas públicas urgentes. Cuatro, realizaremos un evento nacional de diálogo social en julio”.
La protesta, iniciada el 12 de mayo, visibilizó la crítica situación de estas comunidades, que denunciaron falta de acceso a salud, educación, infraestructura y seguridad, así como incumplimiento de acuerdos previos. Durante las jornadas, los manifestantes instalaron carpas y permanecieron día y noche en el corazón político del país, recibiendo apoyo humanitario de la Alcaldía de Bogotá.
Compromisos y seguimiento
El acuerdo incluye:
La Defensoría del Pueblo resaltó la disposición al diálogo de ambas partes, mientras que la Alcaldía capitalina pidió mayor acción nacional. Gustavo Quintero, secretario de Gobierno, afirmó: “Bogotá está asumiendo movilizaciones que llegan de otras regiones. Pedimos al Gobierno acelerar soluciones y promover diálogos desde los territorios”.
Balance de la protesta
La movilización logró:
Con el levantamiento de las carpas, se cierra un capítulo de protesta pacífica que mantuvo en vilo al centro político del país, pero se abre ahora la fase de implementación de lo pactado. La prueba de fuego será la materialización de estos compromisos en mejoras tangibles para las comunidades, históricamente relegadas.
Mientras la pequeña delegación campesina permanece en Bogotá para el trabajo técnico, las miradas están puestas en el evento de julio, donde se evaluará si los acuerdos trascienden el papel y llegan a los territorios que claman por atención estatal.
Humberto ‘Toto’ Torres