Después de ser señalado y cuestionado por el estado de la gramilla, esto tras los conciertos de Shakira, el estadio Nemesio Camacho ya tiene fecha para cambiar de su grama natural a grama sintética, en proceso que se cataloga técnicamente como el cambio de césped más ambicioso en la historia del fútbol colombiano.
La maquinaria encargada de realizar el proceso ya se encuentra en la capital. Bajo la firma GrassMax Systems, se confirmó que el proyecto no solamente será un simple cambio de grama, será una intervención de fondo que conecta con una visión moderna del espectáculo, del mantenimiento eficiente y del rol del estadio como plataforma de eventos internacionales. El proyecto se alinea con lo que ya ocurre en estadios de primer nivel mundial que cuentan con tecnología de gramilla híbrida GrassMax, entre ellos el Santiago Bernabéu, el Orange Vélodrome de Marsella, el Vodafone Park Arena de Estambul, Anoeta en San Sebastián y San Mamés en Bilbao. En Colombia, estadios como el Techo en Bogotá y el Pascual Guerrero de Cali cuentan con este sistema y excelentes resultados.
Me imagino que acá @SenciaBogota también responderá tuits o sacará algún video explicando porque la gramilla del Estadio Nemesio Camacho el Campín se volvió una de las peores del país. https://t.co/fFSOzAV1ms
— Andrés. (@Andres_Daza15) May 28, 2025
Cómo se llevará a cabo el proceso de cambio de grama del Campín
El sistema híbrido consiste en la inyección de fibras sintéticas cada dos cm² sobre una base de césped natural, lo que permite una superficie más estable, resistente y duradera. Esta tecnología permite multiplicar la capacidad de uso del campo sin afectar el rendimiento ni la estética del terreno de juego. “Queremos que el estadio esté a la altura de los grandes estadios del mundo. Este es un paso muy importante para transformar la experiencia del deporte y de la ciudad misma, y con el mejor aliado posible, una compañía especializada y reconocida a nivel global. Esta tecnología garantiza rendimiento, estética y sostenibilidad en un solo sistema”, afirma Mauricio Hoyos, CEO de Sencia.
La mezcla del césped del Nemesio Camacho oscilará entre un 85 – 90 % de grama natural y un 10 – 15 % de sintética. El césped natural continuará siendo el kikuyo grass, el cual está adaptado al clima frío y a las condiciones climáticas de Bogotá. El sistema de drenaje será optimizado para garantizar un juego más rápido y seguro, incluso en condiciones climáticas adversas. Además, sensores de humedad y un sistema de riego inteligente permitirán una gestión eficiente del agua y los fertilizantes, alineándose con estándares globales de sostenibilidad.
"La grama es un desastre, hasta yo tengo el tobillo hinchado, pero eso no nos compete a nosotros, aunque afecta el rendimiento de los equipos": Montero al ser consultado por el estado de la cancha y la lesión de Leo Castro.
— Theo González Castaño (@Theo_Gonzalez) March 30, 2025
La verdad sí está horrible la cancha de El Campín. 😞 pic.twitter.com/Pw5ERHWab5
El cambio de grama: aportará al espectáculo y será amigable con el medio ambiente
Otro de los factores claves en el cambio de grama es la recuperación, clave teniendo en cuenta que el estadio El Campín, ahora, de acuerdo con las declaraciones de sus nuevos administradores, es de todos y para todos, motivo por el cual, el mismo será prestado ya no solamente para recitales, sino a su vez también para cualquier evento, desde que estén garantizadas las condiciones y se haga el respectivo pago.
Este avance técnico también impacta el espectáculo. El ritmo del juego mejora, el balón corre con mayor precisión y se reduce drásticamente la probabilidad de suspensiones por clima. Así, se amplía la disponibilidad del estadio para selecciones, torneos juveniles, ligas profesionales y grandes conciertos, sin comprometer la salud del césped. Tras Bogotá, el equipo de GrassMax viajará a México para hibridar el estadio Azteca, uno de los templos del fútbol y sede inaugural de la Copa Mundial 2026.
En materia de sostenibilidad, maximiza la eficiencia en el uso del agua, reduce significativamente el uso de fertilizantes y extiende notablemente la vida útil del terreno, minimizando la necesidad de resembrar y reduciendo la huella de carbono. De esta forma, dialoga con un modelo mucho más sostenible y responsable con el medio ambiente.
Finalmente, el cambio de grama comenzará inmediatamente termine el torneo en su primer semestre. Los primeros trabajos estarán a cargo de la reconocida firma belga GrassMax Systems y su máquina de cosido. La entrega de la nueva gramilla híbrida estaría programada para finales del mes de julio, justo antes del inicio de la competencia en el segundo semestre.
Alexander Cortés