El Gobierno del presidente Joe Biden sancionó al área de la minería aurífera en Nicaragua por ser un sector determinante que es financiado por el ejecutivo. Este es un nuevo intento para aumentar la presión política y económica sobre el presidente Daniel ortega.
La Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro aplicó sanciones económicas a la Dirección General de Minas (DGM), que opera la mayoría de las gestiones mineras en Nicaragua en nombre del Gobierno.
El Departamento del Tesoro en un comunicado afirma: “Es una pieza importante de las operaciones de oro controladas por el Estado en Nicaragua. Ortega y sus compinches continúan utilizando las ganancias derivadas de la producción y venta de oro para llenar sus bolsillos y pagar a quienes mantienen al régimen en el poder”.
El punto esencial que busca atacarse con las sanciones es impedir que el Ejecutivo de Ortega y de su esposa y vicepresidenta, Rosario Murillo, pueda utilizar las ganancias del oro para oprimir al pueblo nicaragüense.
En el comunicado del Departamento de estado se insiste: “El Gobierno nicaragüense ha utilizado este poder para intimidar y encarcelar a quienes denuncian la corrupción del régimen y para sembrar inestabilidad en todo el mundo”.
Cabe resaltar que Nicaragua fue uno de los cuatro países, y el único latinoamericano, que se alineó con Rusia en contra de una resolución de la Asamblea General de la ONU que condenaba el intento de Moscú de anexión unilateral dos regiones y dos provincias de Ucrania.
En la actualidad, más de 200 opositores están presos en Nicaragua desde las manifestaciones de 2018, que el Gobierno de Ortega vinculó con un supuesto fallido golpe de Estado promovido por Washington.
La relación entre Estados Unidos y el Gobierno nicaragüense, en el poder desde 2007, es especialmente complicada desde las elecciones en Nicaragua en 2021, consideradas fraudulentas por la comunidad internacional y que se llevaron a cabo con los opositores del mandatario presos o en el exilio.
La Casa Blanca, que ya ha sancionado a un número alto de funcionarios y personas del entorno de Ortega, planea con esta medida aumentar la presión sobre el gobierno de Nicaragua, que también ha cerrado más de 2.000 oenegés y tomado represalias contra líderes religiosos y universidades privadas.
Washington, también tomó medidas sancionatorias contra Lenín Cerna, exsecretario de organización del Frente Sandinista, exdirector de Seguridad del Estado del gobierno revolucionario sandinista (1979-1990) y durante años uno de los hombres del círculo de confianza de Ortega.
En los informes, Estados Unidos señala que Cerna está acusado de estar involucrado en numerosos actos violentos, asesinatos y torturas y que como jefe de la Seguridad del Estado bajo Ortega “se hizo famoso y temido como torturador”.
Las nuevas medidas de Washington llegan días después de que la Unión Europea (UE) extendiera por un año más su paquete de sanciones al país.
Humberto ‘Toto’ Torres