La situación mundial está en incertidumbre respecto a la duración de la guerra y Colombia está a la expectativa de la contienda electoral presidencial, una de las más polarizadas de los últimos tiempos; los colombianos al evidenciar que la estabilidad política y económica, tienen un riesgo han aumentado su interés por hacer negocios, migrar o tener alguna inversión en los Estados Unidos.
Según Edgar Pulido, director Internacional de las Oficinas en Colombia de la firma norteamericana Latam en USA, “se ha evidenciado que muchos de los inversionistas colombianos han manifestado entre sus principales razones el temor de que Colombia se vaya a volcar a la izquierda. Quieren proteger el patrimonio que han construido durante muchos años,”
Para expertos en inversiones, las variables claves a tener en cuenta a la hora de construir un patrimonio son: la seguridad jurídica, el crecimiento económico y la inflación, aspectos que para colombianos de clase media y el sector empresarial empiezan a verse volubles, en medio de una incendiada campaña electoral, que inquieta la estabilidad económica de gran parte de los ciudadanos.
“En tiempos de incertidumbre, los colombianos están diversificando sus inversiones, pretendiendo generar ecosistemas más estables y consistentes que les permitan mitigar cualquier escenario económico adverso” afirma Pulido.
Los principales medios de inversión que han sido requeridos y utilizados por los colombianos en el tiempo actual son: la Visa de Comercio Exterior E-1, creada para efectuar intercambios comerciales de bienes, productos o servicios y la Visa E-2, destinada a inversionistas. Se trata de visas que permiten tener un estatus legal y poder trabajar durante cinco años, y si el negocio sigue activo, pueden renovarse de manera indefinida. En los últimos seis meses, hemos visto un aumento muy marcado en las búsquedas de este tipo de visas.
Otra alternativa a la que recurrieron los colombianos en el último año fueron las franquicias. Con un monto de inversión mínima desde USD $100,000 se puede negociar una franquicia en territorio estadounidense, y dar un paso decisivo para aplicar a la visa de inversionista, la cual permite al solicitante, vivir, trabajar y tener un estatus legal en USA. Los sectores más atractivos para los colombianos a la hora de invertir son empresas de servicios, mantenimiento, y restaurantes, asegura el licenciado José Torres de FranNet, con más de 20 años de experiencia profesional como asesor en la industria de Franquicias en el sur de la Florida.
Este 2022, también ha evidenciando una tendencia creciente y sostenida en el número de colombianos que, por medio de una inversión calificada, buscan radicarse en la Unión Americana, tales como el programa EB-5 a través de una inversión de USD $800.000 dólares, la cual permite obtener la anhelada “Green Card”. Es decir, a través de la inversión en este modelo, se puede obtener primeramente una residencia temporal, para luego optar por la permanente, y finalmente a la ciudadanía definitiva si así se requiere.
“Actualmente, el monto de la inversión está en los 800 mil dólares. Son requisitos más altos, pero la ventaja de este tipo de visado es la Residencia Permanente y al cabo de cinco años, poder solicitar la Ciudadanía Americana, siempre y cuando se haya cumplido con los objetivos planteados desde el principio.” asegura Christian Taulbee, EB-5 director de la compañía norteamericana Christian Tyler Properties.
Ahora bien, si el interés está en invertir en un tangible, la finca raíz es una alternativa ideal.
Según un informe del Miami Association of Realtors, en el 2021, los colombianos ocuparon el segundo lugar entre los países de la región con mayor cantidad de viviendas adquiridas en el “Sunshine estate” cifra apenas superada por los argentinos. Así, la capital del sol, es el principal destino para los compradores colombianos.
“Sólo el año pasado Colombia registró el 10 por ciento de todas las transacciones de compradores internacionales de inmuebles en el Sur de La Florida, una tendencia que sigue creciendo” explica el abogado Edgar Pulido.
Actualmente, Colombia representa el 12,60% de la nacionalidad de los extranjeros interesados en comprar bienes raíces en Estados Unidos, seguido de Venezuela, con 9,50% y Canadá con un 7%. “Hay oportunidades de inversión en el desarrollo de proyectos residenciales y hoteles que pueden llegar a aportar retornos interesantes. Es atractivo porque se trata de un activo tangible, no depreciable y que además se puede rentar” asegura Sonia Petraitis Caffroni VP Operations de Capital Companies Group.
¿En dónde invertir?
Detroit, se ha convertido en el destino preferido por inversionistas; conocida como la Motor-City, ya que muchas de las grandes industrias del sector automotriz, tenían su sede allí y a pesar de la bancarrota del 2013, producto de la migración forzada que los empleadores corporativos efectuaron, en búsqueda de incentivos impositivos, más favorables. La capital del estado de Michigan, ha surgido de entre las ruinas, convirtiéndose en un modelo de inversión interesante, para aquellas personas que desean tener ganancia en doble vía. Por una parte, con una renta mensual asegurada y altamente competitiva, por otro lado, al procurar una plusvalía al momento de liquidar la posición.
“El precio de los bienes raíces es bastante prometedor, por el bajo costo de la tierra en Detroit, ya que se pueden adquirir inmuebles desde los USD $50,000 dólares, alcanzando retornos en promedio del 13%, suma no despreciable, si se compara, con cualquier otro modelo de inversión,” asegura Mario Yeh desarrollista de la compañía Americas Developers Group, con sede en Detroit.
Las inversiones en dólares, son muy apetecidas, porque derivan varios beneficios, como: la diversificación de portafolio, al no dejar “todos los huevos en una sóla canasta”, se obtiene una monetización en una moneda dura que mitiga la inflación, toda vez que la divisa, se robustece frente al peso y eventualmente, es el camino a establecerse de una manera legal y segura en la unión americana, al ser el medio para migrar junto con la familia del inversor, al calificar en una Visa de Inversionista E-2.