La Secretaría Distrital de Ambiente, en articulación con la Secretaría Distrital de Planeación, la Secretaría Jurídica Distrital y la Secretaría Distrital del Hábitat, la Alcaldía Mayor de Bogotá, presentó al Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible una propuesta metodológica para construir los lineamientos del ordenamiento ambiental de la Sabana de Bogotá.
La propuesta fue radicada en el marco de un espacio de coordinación interinstitucional iniciado este 5 de junio de 2025, con el propósito de asegurar una articulación territorial efectiva y una base técnica sólida para el proceso de planificación.
“Estamos preparados para trabajar conjuntamente con el Ministerio de Ambiente, con conocimiento profundo del territorio, estudios rigurosos y acciones concretas ya en curso en materia de restauración, conservación y ordenamiento ambiental”, afirmó Adriana Soto, secretaria Distrital de Ambiente.
🌿 En Bogotá sí pasa, por eso a nuestra capital la cuidamos entre todos.
— Secretaría de Ambiente (@Ambientebogota) June 5, 2025
El Distrito presentó ante @MinAmbienteCo la propuesta metodológica para establecer la ruta para construir de manera conjunta los lineamientos para el ordenamiento ambiental de la sabana.
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Por su parte, desde la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR), se reiteró la urgencia de establecer directrices ambientales que orienten el desarrollo de la Sabana de Bogotá, con el fin de frenar su expansión descontrolada.
El director de la CAR, Alfred Ballesteros, recalcó que estos lineamientos deben construirse desde el territorio y no desde los escritorios. “No todos los municipios pueden tratarse de manera uniforme. Es lo que también hemos solicitado al Ministerio. Cada caso debe analizarse de forma individual, considerando las condiciones ambientales, sociales y particulares de cada localidad”, señaló.
Ballesteros insistió en que este proceso debe ser concertado con el Ministerio de Ambiente, la Gobernación de Cundinamarca, las autoridades ambientales competentes y los municipios directamente involucrados.
Hasta el momento, el Ministerio de Ambiente y la CAR han sostenido cinco encuentros técnicos y jurídicos en los que se han discutido aportes clave para alcanzar un consenso sobre cómo debe organizarse el desarrollo en esta región estratégica del país.
“Hemos superado la capacidad hídrica del territorio. Es urgente establecer determinantes ambientales obligatorias para las entidades locales, que detengan el crecimiento desordenado y poco responsable de la Sabana. Pero dichos lineamientos deben construirse de forma participativa”, advirtió Ballesteros.
El objetivo central es actualizar el modelo de ocupación actual, el cual ha sobrepasado la capacidad de carga del territorio, especialmente en lo relacionado con la disponibilidad de recursos hídricos. La CAR enfatizó que este proceso debe estar en sintonía con el Acuerdo de Escazú, que obliga al Estado a garantizar la participación ciudadana en decisiones que impacten el entorno ambiental.
Finalmente, el director de la CAR expresó su expectativa de que el Ministerio de Ambiente incorpore las recomendaciones de la entidad en la versión definitiva del documento. Esta propuesta, dijo, será fundamental para actualizar el Acuerdo 16 de 1998, que define las determinantes ambientales que deben guiar los planes de ordenamiento territorial de los municipios de la región.
Paola Martínez Burgos