La menopausia es una etapa inevitable en la vida de muchas mujeres, marcada por el cese de los periodos menstruales. Sin embargo, es importante comprender que esta fase se compone de diferentes períodos y se caracteriza por una serie de cambios físicos y emocionales.
Según el comité científico de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la menopausia se inicia con la última regla, generalmente alrededor de los 50 años. Pero es esencial distinguir entre las etapas que la rodean:
1. Perimenopausia o climaterio: Este período abarca desde justo antes de la menopausia, cuando comienzan los cambios hormonales que conducen a síntomas clínicos, hasta al menos el primer año después de la menopausia. Durante este tiempo, se produce la transición de la edad fértil a la no fértil.
2. Posmenopausia establecida: Este concepto se establece retrospectivamente y abarca los 12 meses posteriores al cese definitivo de las menstruaciones.
Los síntomas de la menopausia varían según la etapa en la que se encuentre una mujer. En la premenopausia, los síntomas iniciales suelen ser leves e incluyen cambios vasculares, sudoraciones, bochornos, sequedad vaginal, insomnio y fatiga.
En la postmenopausia, los cambios afectan a diversos órganos y tejidos del cuerpo, incluida la mucosa vaginal, que se vuelve menos lubricada y propensa a infecciones. Además, se producen cambios metabólicos y oncológicos en otros órganos.
El síndrome climatérico, que engloba todas las etapas, puede incluir sudoraciones, mareos, dolores articulares, cefaleas, taquicardias, cambios emocionales y más. Estos síntomas suelen ser más intensos en aquellas mujeres que desempeñan roles domésticos.
Es importante destacar que la experiencia de la menopausia varía significativamente entre las mujeres. No todas experimentan síntomas en la misma medida. La percepción de la menopausia está influenciada por factores como el significado cultural de la menstruación, el rol social de la mujer, la concepción del envejecimiento y la comunicación en la pareja.
Recientemente, el Senado de la República llevó a cabo el Foro “La menopausia: un desafío de política pública”. En este evento, expertos discutieron los impactos de la menopausia en la vida laboral y social de las mujeres, así como las medidas para mitigar estos efectos en la productividad, la economía y la salud de las mujeres.
Se subraya la importancia de hacer ajustes en el estilo de vida para reducir el riesgo de enfermedades a largo plazo, como hipertensión, diabetes, osteoporosis y depresión, que pueden ser más comunes en mujeres postmenopáusicas.
Para garantizar el bienestar de las casi 20 millones de mujeres mexicanas que atraviesan por esta etapa, se resalta la necesidad de capacitar a los profesionales de la salud en la atención primaria para el cuidado integral de la mujer durante el climaterio. La menopausia es una etapa de cambios y desafíos, pero con el apoyo adecuado, las mujeres pueden atravesarla con una buena calidad de vida.
Humberto ‘Toto’ Torres