La Contraloría Distrital de Medellín comunicó este viernes 18 de agosto que se encuentra revisando la forma en que el despacho de Daniel Quintero realiza gastos de la caja menor de la Alcaldía, señalando no descartar iniciar una actuación especial de fiscalización ante el riesgo de irregularidades.
Según expresó la Contraloría, luego de que el caso saliera a hacerse público y se conocieran varios de los gastos que viene haciendo el gobierno de Medellín, analizará en profundidad el uso de esos recursos públicos.
La polémica por el uso de la caja menor de la Alcaldía Antioqueña se desató cuando a través de las redes sociales la abogada Gloria Jaramillo filtró un documento de la Secretaría de Hacienda en el que se especifican cientos de compras que viene realizando el gobierno de la ciudad de las flores, en una cuenta de los Fondos Fijos Reembolsables.
Con dichos fondos, que en teoría deberían usarse solo para gastos de funcionamiento imprevistos, urgentes y necesarios, han costeado compras en cigarrerías, panaderías, supermercados, verdulerías, sitios de comida rápida y algunos costosos restaurantes. La lista de establecimientos en los que se realizaron compras, que van desde pequeñas transacciones hasta otras que son millonarias, incluye algunos como: • Kokoriko • Frisby • Crepes & Waffles • Heladería Soft Touch • Il Forno • Asados La 80 • Donuts Antioquia • Mi Buñuelo • Cocorolló • La Miguería • Los Perritos • D1, Éxito • Carulla • Cencosud • Pricesmart • Okus • San Carbón
Hasta establecimientos como Hijo Negado, dedicado al expendio de bebidas alcohólicas, en los que se hicieron compras por al menos $3.100.000.
Dicho fondo, cuyo responsable es el secretario Privado, Juan David Duque, también aumentó ostensiblemente su tope de aprovisionamiento, que pasó de $2 millones al inicio del gobierno a 20 salarios mínimos.
Además de todos estos gastos, la Contraloría señaló que también revisará las condiciones que llevaron a que el restaurante San Carbón, uno de los establecimientos en los que hicieron compras, decidiera iniciar un proceso de cobro prejurídico en contra de la Alcaldía, debido a varios consumos registrados como “gastos de representación” que no habían sido saldados.
La Contraloría de Medellín comunicó: “Actualmente, la Contraloría Distrital de Medellín se encuentra evaluando la información que soporta la respuesta del sujeto de control, con el propósito de establecer las acciones a seguir como resultado de la vigilancia fiscal y determinar la pertinencia de dar inicio a una actuación especial de fiscalización, ante el riesgo en el uso inapropiado de recursos públicos de conformidad con los nuevos hechos evidenciados en desarrollo de dicha vigilancia”.
Escrito por Daniela Borbon