En un acto que ha generado controversia, la Dirección Administrativa de la Cámara de Representantes instaló dispositivos en las oficinas de los congresistas que permitían ver y escuchar en tiempo real. Esta medida, que forma parte de un proceso de reestructuración con un contrato millonario, ha sido denunciada por los legisladores como una grave violación a su intimidad y derechos.
Los congresistas de diversas bancadas expresaron su preocupación y molestia por la instalación de estos dispositivos sin previo aviso. Según ellos, las oficinas son espacios donde se discuten asuntos legislativos confidenciales, y la presencia de cámaras con capacidad de grabación de audio representa un riesgo para la seguridad y privacidad de sus comunicaciones.
“Son dispositivos para el manejo de las luces que eran aparentemente inteligentes, pero que generan cuestionamientos y preocupaciones. El primero de ellos es cuál es la funcionalidad de que tuvieran cámara y sonido, y lo más grave es que cuando intentamos tapar la cámara aparecen al otro día unos funcionarios diciendo que estábamos obstruyendo su funcionamiento”, explicó el representante Duvalier Sánchez.
Desde la oposición, se ha levantado aún más alarma sobre la situación, sugiriendo que esto podría estar relacionado con prácticas de espionaje. “Esto para la oposición es muy grave porque hoy que conocemos que podemos estar siendo interceptados en una operación orión nos genera preocupación. Este es un sistema muy vulnerable para poder ser interceptados y darse cuenta de todo lo que hablamos en las oficinas. Esto es de la máxima gravedad y hay que prender las alarmas”, declaró la representante de Cambio Radical Carolina Arbeláez.
La representante Alexandra Vásquez del Pacto Histórico también se unió a las críticas, resaltando que nunca fueron informados sobre la instalación de estos dispositivos, lo cual considera una intromisión en la privacidad de sus actividades diarias y de trabajo legislativo.
Ante las acusaciones, el director administrativo de la Cámara de Representantes, Jhon Abiud Ramírez, aclaró que los dispositivos fueron originalmente instalados para “automatizar las luces” y que fueron retirados tras las denuncias de los congresistas por preocupaciones de privacidad.
En respuesta a las denuncias, la Cámara de Representantes emitió un comunicado negando cualquier tipo de espionaje y anunciando la retirada inmediata de los dispositivos, comprometiéndose a respetar la privacidad y seguridad de los legisladores y sus equipos de trabajo.
Humberto ‘Toto’ Torres