Según cifras de la Organización de Naciones Unidas, de todos los desechos plásticos que se han producido a lo largo de la historia únicamente el 9% ha sido reciclado, el 12% incinerado y el 79% restante se ha acumulado en basureros, vertederos o en el medio ambiente. Es por ello, que el reciclaje es cada vez más importante y necesario para reducir la huella ambiental y el cuidado de las fuentes hídricas.
Con el fin de contribuir con la economía circular de Colombia, empresas como Cruz Verde a través de Recuperadores Circulares, su programa de valorización y recuperación de materiales ha conseguido recuperar cerca de 300.000 Kg de materiales como cartón, papel, plásticos, poliestireno expandido, chatarra y madera en el año 2021 y, posteriormente darles un segundo uso hasta que se deterioren por completo.
Claudia Sterling, vicepresidente Legal y de Asuntos Corporativos de Cruz Verde explica que en el último año gracias a la recuperación de estos materiales la entidad consiguió evitar la tala de más de 4.500 árboles, ahorrar más de 72 millones de litros de agua y evitar la emisión de más de 970 mil Kg de CO2. Actualmente la compañía se encuentra en la ejecución de diferentes programas relacionados con el cambio climático, el agua y la economía circular.
Con este tipo de iniciativas el sector privado quiere aportar al cuidado del medio ambiente disminuyendo la tala de árboles y el desperdicio de agua, mejorando las condiciones de los recicladores de oficio al destacar su labor diaria e incluso llegando a formalizar su forma de empleo.
¿Cómo contribuir con la crisis mundial del agua?
Pese a los esfuerzos que adelantan las organizaciones y los gobiernos internacionales, 2.200 millones de personas aún continúan viviendo sin acceso al agua potable, esto puede ser ocasionado por las limitaciones geográficas y la contaminación de fuentes hídricas, entre otras.
De manera individual todos podemos aportar al cuidado del medio ambiente con acciones que no demandan gran esfuerzo y que sí pueden hacer la diferencia.
Siembra de árboles: permite la recuperación de agua y vida terrestre. De acuerdo con cifras del Ministerio de Ambiente, cada colombiano emite en promedio 4 toneladas de CO2 al año y un solo árbol puede absorber entre 10 kg y 30 kg de CO2 al año, por lo cual, entre más árboles se siembran el impacto será mayor.
Uso racional de recursos como el agua y la energía: mejorar los hábitos de consumo permitirá contribuir al cuidado del medio ambiente y, además, impactará en el bolsillo de los colombianos.
Reducir el consumo de materiales, residuos o empaques: permite generar menos desechos que generan un alto impacto ambiental y que, posteriormente, terminan en rellenos sanitarios.
“Somos conscientes de que los recursos que actualmente existen nos impulsan en el desarrollo. Sin embargo, debemos conservarlos de tal manera que puedan permanecer en el tiempo para las generaciones futuras. Nos comprometemos con el desarrollo ambiental, social y económico, de nuestra gente, nuestras comunidades y nuestro planeta”, concluyó Claudia Sterling, vicepresidente Legal y de Asuntos Corporativos de Cruz Verde.