Así avanza el retorno de la población Emberá y la recuperación del Parque Nacional

Inició el retorno de la comunidad Emberá, que estaba en el Parque Nacional, a su territorio, con el acompañamiento de siete entidades de la administración distrital, entre ellas la Alta Consejería de Paz, Víctimas y Reconciliación de la ciudad.

Según la Secretaría de Integración Social, además de garantizar su protección durante estos meses, hay una inversión de 1.685 millones de pesos para asegurar el transporte, la alimentación y giros condicionados a la permanencia en el territorio, a través del mecanismo del Ingreso Mínimo Garantizado.

De esta manera, 163 hogares de la comunidad Emberá recibirán transferencias monetarias de $754.000 cada uno, a partir de este lunes, como parte del proceso de retorno, reubicación o integración local.

Esto es posible gracias a la firma de un convenio con el Banco Agrario, realizada por la Secretaría de Hacienda, para el retiro del primer ciclo de transferencias en Pueblo Rico, Risaralda, una vez la población arribe a su lugar de origen.

De esta manera, finaliza el proceso de retorno de 844 personas de esta comunidad. De este grupo, 694 personas retornarán a Pueblo Rico (Risaralda), Bagadó y Tadó (Chocó). Además, 130 personas serán reubicadas y 20 serán integradas localmente en Bogotá.

Durante los últimos meses, el distrito indicó que se ha garantizado la prestación de servicios de salud, educación e integración social, con una inversión total cercana a los 6 mil millones de pesos.

De acuerdo con el alcalde mayor, Carlos Fernando Galán: “Desde el 11 de julio se instaló el Puesto de Mando Unificado en el Parque Nacional, coordinado por la Consejería de Paz, lo que nos ha permitido prevenir riesgos y enfrentar vulneraciones a los Derechos Humanos, así como alistar las condiciones para el retorno que inicia este fin de semana. En total, han participado 7 entidades del Distrito”, dijo Galán.

Desde el inicio, se le dio carácter de urgencia y especial atención a la situación de la comunidad Emberá en la ciudad, debido a denuncias de violencia de género y presuntos casos de abuso sexual a menores.

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Por ello, se creó la estrategia “Acción Emberá”, que incluyó diversas acciones, rutas y mecanismos para atender a esta población. Una de las principales acciones fue la creación del PMU ‘Estrategia Móvil 24/7’, instalado en el Parque Nacional el 11 de julio, bajo la dirección de la Consejería de Paz, Víctimas y Reconciliación de Bogotá.

Esta estrategia incluyó la participación de las Secretarías de Gobierno, Integración Social, Seguridad, Salud, Educación y Ambiente, en articulación con el ICBF y la Policía de Infancia y Adolescencia.

Durante aproximadamente 500 recorridos, se identificaron 522 situaciones de riesgo, entre ellas: 183 reportes de niñas, niños y adolescentes sin supervisión adulta; 44 casos de exposición a sustancias psicoactivas; 22 reportes de manipulación de elementos peligrosos; 138 reportes de la presencia de personas ajenas a la comunidad; 56 situaciones de riesgo de accidentes viales; y 15 posibles casos de violencia sexual, denunciados ante la Fiscalía.

Del total de situaciones de riesgo, se activaron rutas en el 71 % de los casos, que incluyeron instrucciones para la prevención del riesgo, acompañamiento psicosocial, actividades pedagógicas y remisión a centros de atención en salud y a la Policía, entre otros.

De la misma manera, la administración distrital anunció que se enfocará en la recuperación del Parque Nacional, para lo cual activará un protocolo que contempla las siguientes fases: recuperación y cuidados intensivos del parque.

Este ejercicio, liderado por la Secretaría de Gobierno y de manera articulada con las demás entidades, buscará rescatar el valor patrimonial del parque, generar apropiación y trabajo conjunto con la ciudadanía, y reactivar la oferta cultural, recreativa y deportiva, así como su aprovechamiento para la reactivación de ferias campesinas y emprendimientos.

He corregido algunos errores de ortografía y gramática, como la concordancia de género y número, y he añadido algunas comas para mayor claridad.

Paola Martínez Burgos