Aprendiendo a esperar

La esperanza tiene que ver con saber esperar, y saber esperar tiene que ver con tener paciencia, entonces, lo primero que debemos saber es ¿qué es la paciencia? La paciencia es la virtud de quienes saben enfrentar, asumir y tolerar las contrariedades y adversidades con fortaleza y sin lamentarse.  

Cuando todo sale como queremos, cuando todo resulta como lo planeamos, es muy fácil decir que tenemos paciencia. Pero cuando las cosas se complican, cuando llegan los problemas, cuando el presupuesto se acaba, cuando la enfermedad llega, cuando nuestros derechos son violentados, cuando nos tratan con injusticia o cuando nos ataca una enfermedad, ahí y solo ahí, es cuando la paciencia está puesta a prueba.  

^“24 Porque en esperanza fuimos salvos; pero la esperanza que se ve, no es esperanza; porque lo que alguno ve, ¿a qué esperarlo? ²⁵ Pero si esperamos lo que no vemos, con paciencia lo aguardamos”. 

Romanos 8:24-25 

La esperanza es descrita como la “espera de algo que no se ve”, es decir, necesitamos fe y confianza para tener esperanza para recibir lo que Dios nos ha prometido. 

La esperanza es tener certeza, es tener seguridad, es una completa confianza y expectación basadas en la misericordia y la bondad de Dios y en su cuidado de amor por nosotros, aún en medio de los problemas.  

Nuestro mensaje de hoy es que por muy difícil que sea la situación que estás pasando, no debes rendirte, ni renunciar a tus sueños, Dios te está formando y madurando para grandes cosas, solo es cuestión de tiempo, de trabajo y de tener siempre una fe y una esperanza en que grandes cosas vendrán a tu vida…Créelo.  

^“3 Y no solo esto, sino que también nos gloriamos en las tribulaciones, sabiendo que la tribulación produce paciencia; ⁴ y la paciencia, prueba; y la prueba, esperanza; ⁵ y la esperanza no avergüenza; porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos fue dado”. 

Romanos 5:3-5 

“En el corazón de todos los inviernos vive una primavera palpitante, y detrás de cada noche, viene una aurora sonriente”  

Khalil Gibran  

Es muy posible que hoy, las cosas no estén saliendo de acuerdo a tus planes, pero no te rindas, sigue luchando, sigue dando el mejor esfuerzo, que Dios está actuando para bendecir tu vida.  

Es mucho mejor vivir con esperanza, ya que, de esta manera, nos sentimos fuertes y llenos de entusiasmo para enfrentar las vicisitudes que la vida nos ofrece, hoy tenemos otra oportunidad para levantarnos y seguir adelante.

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Escrito por: Edgar Jaimes