Los trabajos de ampliación del Hospital Occidente de Kennedy fueron el escenario para que la alcaldesa mayor Claudia López hiciera un balance de los principales frentes de obra que registran avances significativos, de las que ya han sido entregadas a la ciudad por parte del Distrito o que lo serán durante la presente administración.
“Este hospital (Kennedy) por ejemplo, los alcaldes suelen hacer algo y es que una obra que cuesta 100.000 millones de pesos la pisan con 20.000 millones solo para poder decir que la empezaron, pero no ponen los recursos que se necesitan para terminarlas. Las obras no se contratan por la vanidad o la campaña: se contratan para terminarlas y, por lo tanto, la adecuada planeación –que es en lo que nos ha insistido la Contraloría– implica que, si uno sabe desde el principio que la obra cuesta 100, tiene que conseguir los 100”, afirmó la Alcaldesa Mayor en su recorrido por esta obra.
Añadió la mandataria que “nos propusimos con la Contraloría Distrital, ellos en el marco de investigación adelantaron el control competente, pero en lo que nos competía trabajar en conjunto nos propusiéramos terminar las obras. Las obras no se pueden dejar tiradas, las obras no son de los alcaldes ni de sus peleas o campañas. Son de los impuestos de los bogotanos y, por lo tanto, una vez se inicien deben terminarse. Eso es lo que hemos hecho”
Por su parte, el contralor distrital, Andrés Castro Franco, resaltó que “el control fiscal nos ha permitido impedir que Bogotá se convierta en cementerio de elefantes. Con trabajo mancomunado, pero respetuoso de la autonomía e independencia institucional, hemos construido sobre lo construido. La mejor forma de generar confianza en la ciudadanía es velar por sus intereses, hacer valer sus impuestos y entregar hechas las obras. Las obras son de la gente, no de un gobierno”.