¿Qué impacto tendrá el nuevo impuesto al carbón en la economía local y en las comunidades mineras?
La Asociación Colombiana de Minería (ACM) ha expresado serias preocupaciones sobre el reciente decreto de conmoción interior emitido por el Gobierno Nacional. Según el gremio, esta decisión genera incertidumbre en el sector minero-energético en un contexto de creciente carga impositiva. La ACM sostiene que la crisis de seguridad en Catatumbo no es nueva, sino un problema que se ha venido denunciando durante dos años sin obtener una respuesta efectiva del Gobierno. A pesar de los múltiples llamados de atención realizados por comunidades, autoridades locales y otras agremiaciones, el deterioro del orden público y el avance de los grupos ilegales no han sido abordados adecuadamente.
El gremio criticó la falta de monitoreo sobre los indicadores de violencia y deterioro social en Catatumbo, a pesar de que la región ha sido un foco clave para la implementación de la Paz Total. La ACM argumenta que si la zona ha sido priorizada en la estrategia de paz del Gobierno, deberían haberse implementado medidas concretas para evitar el agravamiento de la crisis. Esta situación ha llevado al gremio a rechazar el decreto de conmoción interior, afirmando que la Ley Estatutaria y la Constitución solo permiten esta medida en situaciones extraordinarias o imprevistas, lo cual no se justifica en este caso.
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La ACM también expresó su rechazo a los actos de violencia contra las instalaciones de Cerrejón, señalando que estas acciones solo empeoran la situación en el sector minero-energético. Juan Camilo Nariño, presidente de la ACM, afirmó: “Esta figura constitucional no puede convertirse en una herramienta para corregir la falta de previsión, las deficiencias en la gestión y administración del Estado, ni en un ‘fast track’ para revivir iniciativas legislativas y tributarias que no avanzaron en el Congreso”. El gremio hizo un llamado al Gobierno para que se replantee la decisión y se diseñen estrategias de seguridad y financiamiento público equitativo y sostenible.
El gremio minero también manifestó que el decreto de conmoción interior podría tener un impacto negativo en el sector, ya afectado por una mayor carga impositiva. La ACM reiteró que la figura de la conmoción interior solo debe declararse en casos realmente extraordinarios, y no como una respuesta a problemas que se han venido gestando durante años sin una solución adecuada. La falta de previsión y la deficiente gestión del Estado no justifican el uso de esta medida.
Finalmente, la ACM hizo énfasis en la necesidad de un monitoreo riguroso y la implementación de medidas concretas para mejorar la seguridad en la región del Catatumbo. La agremiación destacó que, para lograr una verdadera Paz Total, es fundamental abordar de manera efectiva los problemas de violencia y deterioro social en la zona, garantizando así un entorno seguro y estable para el desarrollo del sector minero-energético y para las comunidades locales.
Juan Joya