El domingo 29 de septiembre, el papa Francisco emitió unas declaraciones respecto al aborto que están generando controversia entre los grupos que apoyan esta práctica.
En un vuelo de regreso al Vaticano, tras una visita a Luxemburgo y Bélgica, el pontífice afirmó que el aborto es un “homicidio” y que los médicos que lo practican son “sicarios”.
Durante una ronda de preguntas, la corresponsal de la RTS (Radio Televisión de la Suiza francófona), Valerie Dupont, le preguntó cómo se puede conciliar el derecho a la vida con el derecho de las mujeres a vivir sin sufrimiento. A lo que el líder de la Iglesia Católica respondió que, si bien es cierto que las mujeres tienen derecho a vivir su vida, los bebés también tienen ese derecho.
“Las mujeres tienen derecho a la vida, a la vida suya y a la vida de sus hijos. No olvidemos decir esto: un aborto es un homicidio. La ciencia nos dice que al mes de la concepción ya están todos los órganos. Se mata a un ser humano. Los médicos que se prestan a esto son, si me permiten la palabra, sicarios; y sobre esto no se puede discutir. Se mata a una vida humana”, expresó el papa.
Seguidamente, reiteró que las mujeres tienen derecho a proteger la vida, y que hay una diferencia entre usar métodos anticonceptivos para evitar el embarazo y decidir abortar una vez que ya están embarazadas. “No hay que confundir. Ahora hablo sólo del aborto. Y eso no se puede debatir. Discúlpeme, pero es la verdad”, puntualizó.
El papa Francisco también anunció que continúa el proceso de beatificación del rey Balduino, una figura histórica que en 1990 se opuso a promulgar la ley que despenalizaba el aborto en Bélgica. El pontífice destacó la valentía del monarca al abdicar temporalmente del trono para no verse obligado a firmar una ley que consideraba inmoral.
“Todo es vida, ¿eh? El rey fue valiente porque, ante una ley de muerte, no firmó y dimitió. Eso requiere valor, ¿no? Hace falta un político ‘con pantalones’ para hacer eso. Hace falta valor. Él también dio un mensaje con esto y lo hizo porque era un santo. Todavía no es un santo, pero el proceso de beatificación seguirá adelante, porque hemos tenido pruebas de ello”, señaló.
Dayineth Isabel Molina Velásquez