El alcalde Carlos Fernando Galán alertó sobre la situación energética en Bogotá y la región. La alerta la lanzó durante su intervención en la Comisión Quinta Constitucional Permanente en la Cámara de Representantes, en el debate de control político al trámite de licencias ambientales para proyectos estratégicos de Bogotá.
El alcalde afirmó que: “Los proyectos de transmisión de energía Chivor Norte y Sogamoso (…) son fundamentales para el futuro energético de Bogotá, y su entrada en operación es urgente, ya que actualmente la ciudad cuenta con una sola línea de transmisión de alta capacidad. Sin estas infraestructuras, no solo se pondrá en riesgo la estabilidad del suministro eléctrico, sino que también se limitarán las posibilidades de ampliar los proyectos de movilidad eléctrica y sostenibilidad”, sostuvo.
Bogotá y la región hoy tienen una demanda que está apenas a 400 megavatios de alcanzar la capacidad máxima que tienen las redes de transmisión que traen la energía a la capital. Sumado a esto, la ciudad tiene grandes retos energéticos en el futuro cercano, debido a la entrada en operación del Metro de Bogotá y la ampliación de la flota de buses eléctricos en el sistema de transporte.
“Estamos construyendo la Línea 1 del Metro de Bogotá que va bien (…) va a permitir reducir las emisiones de gases en cerca del 8 %”, señaló Galán.
El alcalde, además, aseguró que la ciudad coincide en la necesidad de avanzar hacia fuentes alternativas de energía. “Compartimos el objetivo del Gobierno Nacional de avanzar en una transición energética y, por esto, vamos a participar en las comunidades energéticas propuestas por el Gobierno”, afirmó el alcalde.
Sin embargo, advirtió que “esta medida no cubre las necesidades de la ciudad: Bogotá necesita grandes proyectos de infraestructura que aseguren el suministro necesario para su crecimiento”, sostuvo el mandatario de los bogotanos.
En este debate de control político también participó el presidente del Grupo de Energía Bogotá, Juan Ricardo Ortega. El directivo del GEB mostró su preocupación por el suministro de energía a partir del año 2026.
“No hay cómo suministrar energía a Bogotá si no se cuentan con las líneas de transmisión”, expresó Ortega, quien además explicó que el Metro requiere para su funcionamiento más de 20 megavatios (MW), los buses de TransMilenio 17 y los cables aéreos aproximadamente 10 megavatios. “Toda esa electricidad no hay cómo suministrarla a partir del año 2026 si no se cuentan con las líneas de transmisión”, reiteró.
Ortega fue enfático en afirmar que, si el país quiere avanzar, se requiere con urgencia de electrificación.
“No tiene sentido hablar de una transición energética si pensamos que el crecimiento de la demanda de energía va a ser del 2 %. Si queremos resolver los temas de calidad del aire y los temas de cambio climático, se requiere electrificación”, puntualizó el alto directivo.
Además, cabe recordar que recientemente el Consejo Mundial de Energía Colombia también había encendido las alarmas sobre la incertidumbre que actualmente vive el sector energético, que podría afectar la confianza de los inversionistas en grandes proyectos para el país.
Paola Martínez Burgos