Maximiliano Falcón silenció el Metropolitano y consumó una eliminación que deja a Junior tambaleando y sin su objetivo principal.
Como lo tituló Gabriel García Márquez en su obra literaria “Crónica de una muerte anunciada”, así fue la eliminación de Junior de Barranquilla ante un correcto Colo Colo, que, sin sobrarle nada y sin su gran referente Arturo Vidal, terminó ganando los dos juegos de la llave y dándole el portazo final a un proceso que fue de más a menos. Con el estadio lleno, el equipo volvió a decepcionar, despidiéndose prematuramente del certamen de clubes más importante del continente.
El mal presente del equipo más grande del Atlántico se reflejó anoche en la gramilla del Metropolitano. Con la responsabilidad de salir a buscar el resultado, Junior tuvo pinceladas y buenos momentos futbolísticos, los cuales terminaron siendo fugaces. Durante la mayor parte del juego, el equipo rojiblanco no encontró equilibrio ni estabilidad. El factor emocional nuevamente se apoderó de los jugadores, quienes no lograron vulnerar el buen trabajo defensivo del ‘cacique’. A partir del orden, la agresividad y la dinámica sin balón, Colo Colo limitó a Junior, llevándolo a un terreno donde la impaciencia y el tiempo jugaron en su contra. El equipo barranquillero se despidió de la Copa Libertadores sin pena ni gloria y sin poder ganar en condición de local.
“Tenemos que comprometernos más. Nos vuelven a hacer un gol de pelota quieta y yo creo que en estos momentos… ¿qué podemos decir? Pedir perdón por la gente que nos viene a apoyar, y a pesar de todo, nos siguen apoyando, y nosotros seguimos haciendo la misma cagada”, declaró tras el partido el capitán Carlos Bacca.
Así de crudo y directo fue el análisis de la derrota y eliminación por parte del histórico goleador Carlos Bacca. Sus palabras reflejan lo que se vivió dentro del terreno de juego: una mezcla de impotencia y escasez de ideas que dejó en evidencia que Junior sigue siendo un equipo con una chequera grande, pero con poca preparación y planeación. A nivel internacional, le sigue costando a pesar de tener una nómina robusta. Anoche, completó 28 años sin lograr meterse entre los 8 mejores del continente, una deuda que queda pendiente. Ahora, tras la eliminación, solo le queda enderezar el camino en el torneo local, donde, a pesar de un mal inicio, ha venido encontrando resultados positivos.
Por su parte, Colo Colo rompió la racha y, luego de seis años, llega nuevamente a la instancia de cuartos de final, donde espera rival de la llave que se definirá esta noche entre River Plate y Talleres de Córdoba.
Arturo Reyes, el nombre que está en duda en Barranquilla, lejos de mostrarse vulnerable y desanimado, resaltó la eficacia del conjunto de Colo Colo, que terminó definiendo la serie. Así mismo, no dio señales de querer dar un paso al costado, aseverando que tiene contrato hasta diciembre y que, por el momento, su idea es continuar al frente del equipo.
Alexander Cortés