Continúa la polémica por la boletería visitante para el juego de vuelta este sábado en el estadio El Campín.
Terminado el juego en el Alfonso López, mucho se ha hablado sobre las declaraciones del presidente de Independiente Santa Fe, quien afirmó que fue objeto de agresiones por parte del grupo logístico del juego. Además, rechazó completamente la invasión por parte de los hinchas leopardos al final del encuentro.
“Al final del partido, como todos vieron, se invadió la cancha y la gente de logística se portó mal y nos agredieron a varios de Santa Fe, a los directivos especialmente. Nos agredieron con empujones y nos agarraron a patadas”, dijo Méndez.
Y agregó: “No voy a correr riesgos. Santa Fe no va a correr riesgos”.
Una vez pública la decisión del dirigente de no permitir el ingreso de hinchas visitantes, se han generado todo tipo de comentarios, ya que las aproximadamente 1,000 boletas disponibles para los aficionados del Bucaramanga, quienes se ubicarían en la tribuna nororiental, estaban prácticamente pre vendidas.
“Todos los factores cambian, la invasión fue una falta gravísima, la pólvora transgredió las normas de Dimayor, la agresión a un fotógrafo. Ni con el Alcalde de Bucaramanga he hablado, el Gobernador bajó luego de los problemas y pidió excusas. Con el Alcalde de Bogotá sí hablamos y estamos llegando a un acuerdo”, comentó Méndez.
Méndez confirmó que si los estamentos encargados toman la decisión de que los aficionados vayan al estadio El Campín, se acatará, pero se les cobrará la boleta más cara.
Méndez también aseguró que en la ida los atendieron bien, pero se quejó de los precios de la boletería. “La boleta de 30,000 se las cobraron a 265,000 y yo lo que les propuse en la reunión con el IDRD es que el espacio que se les dejó a ellos es una boleta de occidental norte, que tiene un valor de 265,000. Vamos a dejarla al máximo del valor, de la más costosa del estadio y equiparamos igualdad en las partes para todos”.
El dirigente fue enfático al argumentar que, según su perspectiva, las finanzas del club se podrían ver afectadas tras la decisión de recibir hinchas visitantes después de lo ocurrido el pasado sábado. “Que a mí el Distrito me garantice que no va a haber nada, que va a ayudar con la seguridad, que no nos va a cobrar más por esa seguridad que nos ponga. Le recuerdo, el arriendo más caro que hay en el país lo paga Bogotá con un 10 por ciento de la taquilla. Nosotros mañana tenemos que pagar alrededor de 1,200 millones entre impuestos y taquilla, más la logística. Nosotros tenemos que garantizar el espectáculo”.
Alexander Cortés