El municipio de Sincelejo se encuentra consternado tras el fatídico fallecimiento de la reconocida docente Loly Luz Díaz Martínez, de 40 años, quien perdió la vida en la madrugada del pasado domingo 19 de mayo, luego de caer desde la terraza de su hogar, ubicado en el barrio El Cortijo.
Los informes indican que la tragedia ocurrió mientras la profesora celebraba su reciente graduación como Magíster en Educación, logro que había alcanzado apenas un día antes. Díaz Martínez había decidido organizar una emotiva celebración en su residencia, invitando a familiares, amigos y colegas para compartir su alegría por este importante logro académico.
La fiesta, que se extendió hasta altas horas de la madrugada, se tornó en tragedia cuando, en circunstancias aún bajo investigación, la docente cayó desde una altura de 1,50 metros, perdiendo el conocimiento de manera inmediata.
Los presentes la trasladaron de urgencia a la clínica Las Peñitas de Sincelejo; sin embargo, lamentablemente, los esfuerzos por salvar su vida resultaron infructuosos y falleció minutos después de su ingreso.
La noticia ha conmocionado a la comunidad educativa y a los habitantes de Sincelejo, quienes recuerdan a Loly Luz Díaz Martínez como una figura querida y respetada en el ámbito académico. Sus colegas, estudiantes y familiares la describen como una profesional comprometida y apasionada por la educación, dejando un profundo vacío en la institución educativa rural San Antonio, donde ejercía su labor docente.
Si bien se manejan diferentes versiones sobre el trágico incidente, una de ellas sugiere que además de celebrar su graduación, la docente conmemoraba el Día del Maestro en compañía de varios amigos y conocidos. Otra versión apunta a que Díaz Martínez resbaló y cayó de cabeza, desencadenando el fatal desenlace.
La educadora, quien estaba casada y dejó en la orfandad a dos hijos menores de edad, deja un legado imborrable en la comunidad educativa de Sincelejo, siendo recordada no solo por su dedicación a la enseñanza, sino también por su calidez humana y su entrega al servicio de la educación.
Saray Vargas López