Las autoridades han empezado a esclarecer los hechos que tuvieron lugar el pasado 18 de abril, cuando se reportó un macabro crimen en una clínica en Medellín, que dejó dos personas muertas y otra herida, generando momentos de pánico en el sector del Poblado. Uno de los fallecidos, al parecer el blanco principal del crimen, fue identificado como Juan Guillermo Aristizábal, quien era urólogo en dicha clínica y sería el médico tratante del asesino.
Según los primeros testimonios, el paciente, identificado como John Ferney Cano, tomó el consultorio, agredió a la asistente de Aristizábal y le disparó al médico, para luego quitarse la vida. El secretario de Seguridad, Manuel Villa, señaló que el cadáver del sujeto fue hallado en el baño con un revólver a su lado.
La hermana del homicida, Marcela Cano, mencionó en una entrevista con Noticias Caracol que su hermano venía sufriendo un intenso dolor en su área genital desde hace nueve años, motivo por el cual consultó al urólogo, aunque su condición empeoró después de la circuncisión.
Asimismo detalló que este atroz crimen fue planeado por Cano con varias semanas de anticipación. Incluso, escribió un libro de 369 páginas que tituló “Memorias de un loco sensible: historias ocultas sobre la circuncisión”.
“El que hizo esta mierda tiene que pagar con su vida. Sabía que no me iba a aliviar. ¿No sé cómo le pueden llamar a eso una cirugía menor? De menor no tiene nada, es una vil mutilación que, a mi juicio, daña la belleza de un pene natural. Aunque tiene sentido siempre y cuando alivie algo, pero yo acababa de descubrir que había perdido mi tiempo y mi dinero”, dice uno de los fragmentos del texto.
Asimismo, la mujer contó cuál fue el detonante, según ella, para que el joven tomara la decisión de planear el asesinato del reconocido doctor, quien ya lo había denunciado ante las autoridades, puesto que aquel lo amenazó en su consultorio.
“Ese procedimiento que le hicieron no le quitó el dolor, antes lo afectó más, porque ya no era solo el dolor que tenía, sino que tenía que lidiar también con la circuncisión que le sangraba, le sacaba pus. Uno no sabe eso, pero que estaba mal hecha”, manifestó inicialmente.
Luego, agregó: “Debido a tantas trabas, la última vez, que fue donde el doctor lo que hizo fue reírse, dijo que no le importaba. Yo pienso que ese fue el detonante, porque ya mi hermano no tenía plata. A mí me llegó a decir: “Esta no se la paso”. Adicionalmente, aseguró no conocer de la existencia del libro, sino hasta que ocurrió la tragedia, pues al parecer tenía el documento con claves en el computador y solo lo dejó sin seguridad cuando decidió cometer el crimen.
Los hechos siguen en materia de investigación por parte de las autoridades.
Por su parte, la Universidad CES se solidarizó con los familiares de la víctima: “Lamentamos profundamente la muerte violenta de nuestro médico egresado, el doctor Juan Guillermo Aristizábal Vásquez, que se desempeñaba como urólogo en la Clínica Medellín. Extendemos a su esposa, María Isabel Trujillo, y a sus hijos, Paulina y Miguel, nuestras más sentidas condolencias y un abrazo fraterno en este difícil momento”, indicó la Universidad CES.
Paola Martínez Burgos