La compañía SpaceX lanzó con éxito en su tercer vuelo el enorme cohete Starship. Se espera que este vuelo orbital, programado para el 2024, sea histórico. Según los expertos, este vehículo de lanzamiento es el más poderoso jamás construido. El lanzamiento de prueba se había estimado que podría ocurrir en cualquier momento dentro de una ventana de 110 minutos, la cual está programada para abrirse a las 8:10 a.m. de este jueves, según SpaceX.
Este logro sucede después de que los reguladores federales aprobaran casi en el último minuto los planes de la compañía para llevar a cabo el tercer vuelo. El cohete Super Heavy consumió la mayor parte de su combustible y se separó de la nave Starship, la etapa superior del Super Heavy.
La Administración Federal de Aviación, que otorga licencias para el lanzamiento de cohetes comerciales, dio a SpaceX luz verde final para la misión: “La FAA determinó que SpaceX cumplió con todos los requisitos de seguridad, medio ambiente, políticas y responsabilidad financiera”, dijo la agencia en un comunicado.
Este vuelo de prueba ocurrió después de dos intentos de llevar el enorme vehículo Starship a velocidades orbitales en 2023 que terminaron en explosiones, y la nave espacial y el propulsor estallaron en llamas antes de llegar a los lugares de aterrizaje previstos.
El cohete, con una altura de 122 metros, se lanzó desde la Starbase cerca de la playa de Boca Chica en el sur de Texas, un pueblo que ha sido desalojado. Se sabe que SpaceX acepta grandes contratiempos en las primeras etapas del desarrollo de una nave espacial, y dice que estos fallos ayudan a la empresa a implementar rápidamente cambios de diseño que conduzcan a mejores resultados.
El director ejecutivo de SpaceX, Elon Musk, ha dicho repetidamente que el cohete es fundamental para la misión fundacional de la compañía: llevar humanos a Marte por primera vez. La nave espacial Starship es fundamental, pues es el vehículo seleccionado por la NASA para llevar a los astronautas a la Luna desde Estados Unidos por primera vez en más de cinco décadas, como parte de su programa Artemis.
La agencia espacial está compitiendo con China en una carrera para desarrollar un puesto avanzado lunar permanente y establecer el precedente para los asentamientos en el espacio profundo. En ese mismo sentido, la NASA se ha comprometido a invertir hasta US$ 4.000 millones en Starship.
Según la hoja de ruta actual de la agencia, Starship completaría el tramo final de la misión tripulada a la Luna, sacando a los astronautas de sus naves espaciales en órbita lunar y transportándolos a la superficie. Se prevé que el primer aterrizaje de un astronauta en el marco del programa Artemis ocurra en septiembre de 2026.
Antes del último vuelo de prueba de Starship en noviembre, Musk indicó que aunque el objetivo del vehículo no era orbitar la Tierra, sí estaba diseñado para alcanzar velocidades vertiginosas necesarias para futuras misiones orbitales. Además, el empresario, también dueño de la red social X, hizo una transmisión oficial del lanzamiento a través de la cuenta oficial de SpaceX. La cual además se transmitió por la NASA en YouTube.
Paola Martínez Burgos