Este viernes se corrió la sexta fracción de la carrera al sol, 198.2 kilómetros, jornada que pasó por Sisteron y La Colle-sur-Loup en la región de Provenza-Alpes-Costa Azul, que además contaba con 4 puertos de montaña, 3 de segunda categoría y 1 de tercera.
Mattias Skjelmosse, se impusó en un sprint a tres en la llegada a La Colle-sur-Loup, cabe recordar que Skjelmosse había estado muy cerca de ganar la etapa hace unos días en el Monte Brouilly, hoy se mostró seguro y ambicioso, características a las cuales les agregó seguramente la experiencia adquirida en la anterior fracción y en 4 horas, 36 minutos y 52 segundos se impuso en la recta al estadounidense Brandon Mcnulty (UAE Emirates) y Matteo Jorgenson (Visma-Lease a Bike) quienes fueron segundo y tercero respectivamente.
Por su parte en la clasificación general McNulty, el corredor del Phoenix, recuperó el maillot amarillo y es el nuevo líder de la clasificación, en segundo lugar aparece Jorgenson a 23 segundos y Lukas Plapp es tercero a 34 segundos.
La otra cara de la moneda, la vivieron los colombianos, quienes perdieron tiempo y a falta de 2 etapas se alejaron del podio, Egan Bernal como ha sido un patrón a lo largo de la Vuelta se mantienen siendo el mejor colombiano ubicado, puesto 6, lo negativo, es que paso de estar a 40 segundos del líder a 1:14, Santiago Buitrago del Baharain Victorius, se vio involucrado en una caída y tuvo problemas con su bicicleta, imprevistos que lo llevaron hacer el más perjudicado del día, no solo perdió el segundo lugar, si no a su vez salió del top 10 de la general, ahora es décimo sexto a 2:39 de McNulty. Harod Tejada (Astana) ascendió al noveno lugar de la general a 1:37 del líder, cierra la tabla de colombianos Rigoberto Urán casilla vigésima primera a 5:27.
Mañana se correrá la séptima y penúltima etapa, la cual es considerada como la etapa reina de la vuelta, inicialmente estaba diseñada fuera un trayecto de 173 kilómetros entre las localidades de Niza y Auron, fracción que además contaba con un puerto de montaña de segunda categoría, otro de primera y uno fuera de categoría. Sin embargo, en los últimos días la organización de la carrera decidió cortar la fracción debido a las difíciles condiciones climáticas que se vienen presentando.
Así mismo, los ciclistas harán el mismo recorrido inicial hasta el kilómetro 89, pero ya no habrá en el Col de Comiane y Auron, un ascenso de 7 kilómetros con una pendiente y media del 7%.
Ahora, realizarán un desvío para subir al Madone d’elle, el cual consta de 15 kilómetros con un 5.7% de promedio con rampas del máximo 8%. Este mítico ascenso ya fue realizado en la París Niza durante la edición del 2016.
Saliendo de Niza, los ciclistas tendrán mucho que hacer con un programa de 104 km y 2.000 metros de desnivel. Los primeros 89 kilómetros de la etapa inicial están retenidos. En Saint-Jean La Rivière, los corredores estarán al pie de la subida final que promete una espectacular batalla final entre los favoritos de la clasificación general.
Alexander Cortés