El martes 30 de enero, el presidente Gustavo Petro y el exmandatario Andrés Pastrana se presentaron en la Fiscalía General de la Nación para una conciliación que no tuvo resultado, a raíz de los encontronazos que han tenido a través de las redes sociales.
Pastrana había señalado que la campaña presidencial de Petro fue financiada por grupos narcotraficantes, a lo que el jefe de Estado lo demandó por injuria y calumnia.
Por consiguiente, el mandatario colombiano compartió en su red social X un comunicado sobre la situación, donde apunta que asistió para defender “la honra y buen nombre” de su Gobierno.
“Ser presidente tiene un periodo fijo, pero ser ciudadano y demócrata es imperecedero, aún en riesgo de nuestra propia vida. Creo y defiendo las instituciones del país que me otorgó el privilegio de dirigirlas y acudo en busca de justicia porque nadie puede estar por encima de la ley”, manifestó Petro.
Seguidamente, expresó que respeta las diferencias, pero no la agresión verbal. “En la querella contra el expresidente Andrés Pastrana pretendo que los líderes demos ejemplo y que nuestra condición de figuras públicas no rebase el límite de la libertad de expresión y toda denuncia esté soportada en pruebas”, añadió.
Asimismo, el actual gobernante informó que la indemnización (de 100 salarios mínimos legales vigentes, equivalentes a $130.000.000), por los perjuicios morales que está requiriendo, “será destinada a una fundación con objeto social”.
Tras este comunicado, el expresidente Pastrana dio respuesta y expuso que “esta es la primera vez que un Presidente en ejercicio denuncia penalmente a un jefe de la oposición por expresar públicamente sus opiniones”.
Continuó expresando que el primer mandatario ha establecido en Colombia el “delito de opinión” y “viola abiertamente la Constitución Política de Colombia, la Carta Democrática de Lima, la Convención Americana de Derechos Humanos y la Declaración Universal de los Derechos Humanos”.
Andrés Pastrano hizo énfasis en que esta vez el denunciado es un líder de la oposición, pero que mañana serán “los periodistas, los académicos o cualquier ciudadano que opine diferente al Gobierno. Petro pretende criminalizar la opinión”.
Seguidamente, el político opositor subrayó que el presidente Petro quiere “silenciar a los críticos de su administración” debido a que no acepta la crítica ni sus múltiples errores, “y por eso acude a perseguir a sus opositores”. También señaló que el Gobierno se está pareciendo más a la “narcodictadura de Venezuela”.
Finalmente, Pastrana declaró que le realizó una propuesta a Petro para que lleven a cabo un debate público ante los ciudadanos y que sea televisado, en donde se exponga “el favorecimiento de su gobierno a grupos criminales y sobre la financiación de su campaña por parte de personas al margen de la ley”, que, en caso de hacerse, los colombianos serán los que analicen si su campaña estuvo relacionada con dinero proveniente del narcotráfico.
Dayineth Molina