La representante a la Cámara, Susana Gómez Cataño, más conocida como Susana Boreal, se enfrenta a un juicio disciplinario por supuesto maltrato y otras acusaciones de un trato irrespetuoso hacia su equipo de trabajo. La Procuraduría General de la Nación llamó a responder a Boreal y a su pareja por denuncias de descalificaciones laborales y préstamos de dinero no devueltos.
Según la Sala Disciplinaria de Instrucción, la congresista y su pareja habrían incurrido en conductas que causaron ofensas y perjuicios a sus colaboradores, desde descalificaciones laborales hasta solicitar préstamos que, al parecer, no fueron reembolsados.
El Ministerio Público, en un extenso documento, detalló que se respaldó en las quejas de trabajadores vinculados a la Unidad de Trabajo legislativo de Boreal entre Agosto de 2022 y enero de 2023. Las denuncias describen un presunto trato ofensivo, ignorancia hacia los trabajadores y un uso manipulador del lenguaje para menospreciar el trabajo y opiniones del equipo.
Estas acusaciones podrían constituir una vulneración a los principios de moralidad y dignidad del cargo ostentado por la congresista y su asesor, según la procuraduría, que provisionalmente ha calificado la conducta como falta grave cometida con dolo.
El informe revela testimonios coincidentes de seis personas que trabajaron en la UTL de Boreal, detallando situaciones en las que se les exigía estar disponibles hasta altas horas de la noche, incluso responder mensajes los fines de semana. Se destaca también que la congresista solicitaba préstamos de dinero y artículos sin devolverlos, y pedía descansar en casas de colaboradores sin cuidar el espacio.
Este proceso también abarca faltas relacionadas con la inclusión de su pareja sentimental como asesor de su Unidad de Trabajo Legislativo, una acción que podría haber violado regulaciones de inhabilidad, incompatibilidad o conflicto de intereses, según señaló la Sala Disciplinaria de Instrucción en marzo durante la apertura de la investigación disciplinaria.
Sala digital Colmundo