🌐 ASTROLABIO # 204 - VIERNES, 12 DE MAYO DEL 2023
Fenómenos recientes en la sociedad internacional nos permiten lanzar la idea de un nuevo tipo de sistema político : el ‘gerifaltismo’.
Un gerifalte es, al mismo tiempo, un personaje que descuella en el ejercicio del poder y que ejerce autoridad de manera aparentemente democrática, pero que, en el fondo, lo que hace es enmascarar sus actos con maniobras retóricas y populachería en dosis tales que termina detentando el poder ( abusando de él ).
Gracias a sus habilidades carismáticas, este dirigente deslumbra a veces a copartidarios e, incluso, a quienes alguna vez fueron sus oponentes, y mediante ese magnetismo logra gobernar.
Estos mecanismos no siempre son coherentes y, por el contrario, la adhesión que el dirigente procura en ciertos sectores sociales bien definidos es inversamente proporcional a su incongruencia intelectual ( muchas veces confundida con rasgos de “genialidad”, precisamente por lo críptico, confuso e improvisado que son, tanto el discurso del líder, como el proyecto político propiamente dicho ).
Lo que sucede es que, a medida que gobierna, este aparato de poder va refinando ese magnetismo con altas dosis de populachería o sea, aquella frívola popularidad que se consigue mediante halagos, canonjías, y la explotación vulgar de las pasiones.
Entonces, mezclando sus encantos con prebendarismo, va enquistándose progresivamente en el poder hasta que horada los cimientos de la democracia sin necesidad de apelar a la violencia directa, aunque, eso sí, promoviendo exhibiciones de fuerza correligionaria que incrementan su fortaleza patrimonialista.
Es así como logra anestesiar a las fuerzas destinadas a ejercer oposición razonable y logra, paradójicamente, banalizarlas, desactivarlas y hasta diluirlas, contando, en no pocas ocasiones, con la propia ineptitud y vacuidad de tales opositores, dedicados al simple parloteo altisonante.
En pocas palabras, el gerifaltismo ( la ‘democracia gerifáltica’ ) está de moda.
Y es justamente lo que está sucediendo en algunos países que sirven como ejemplo : Hungría, Nicaragua, Polonia y Bielorrusia, tan solo para poner algunos de los muchos ejemplos que pueden ser referenciados.
Todo un desafío para los tiempos que corren.
Porque disfrazados de respeto hacia el pluralismo y la separación de poderes, los gerifaltes van apropiándose de la democracia hasta caricaturizarla e instrumentalizarla a su antojo, a su acomodo y sin recato alguno.
vicentetorrijos.com