El presidente estadounidense, Joe Biden, hablará con el líder chino, Xi Jinping, este jueves, en un momento de máximas tensiones entre ambas potencias por las recientes disputas sobre Taiwán. De la misma manera aumentan las preocupaciones sobre una posible visita a Taiwán, reclamada por China, de la presidente de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi.
Funcionarios de la Casa Blanca han dicho que la llamada tendrá una agenda variada y extensa. En ella está incluida la discusión de la invasión militar, armada de Ucrania por parte de Rusia, que China aún no condena.
Asimismo, los funcionarios de la Casa Blanca creen que el intercambio es la mejor opción para encaminar una acertada competencia entre las dos economías más grandes del mundo, cuyos nexos se ven cada día más empañados por las tensiones sobre el gobierno democrático de Taiwán que el presidente chino prometió unir con el continente, por la fuerza si es necesario.
La semana pasada, luego del anuncio de la posible visita a la isla de la presidente de la Cámara de los Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi’, el gobierno chino respondió enfurecido que tomaría medidas firmes y decididas. De la misma forma, advirtió del grave impacto en las relaciones bilaterales si el viaje de Nancy Pelosi se producía.
El mismo Biden sugirió la semana pasada que tenía dudas sobre si una visita de Pelosi sería necesaria en estos momentos o podría suponer riesgos para la seguridad de Taiwán. Por ahora no se ha confirmado si el viaje se llevará a cabo.
Cabe recordar que Washington no tiene relaciones oficiales con Taiwán, y sostiene la política de una sola China; lo que genera el reconocimiento diplomático a Beijing, no a Taipei, pero gracias a la ley estadounidense debe otorgar a la isla los medios para defenderse, y ha aumentado la presión en el Congreso para obtener un apoyo más explícito.
El presidente chino tiene la intención de evitar la confrontación tensa con Estados Unidos, mientras busca un tercer mandato sin precedentes en el congreso del Partido Comunista de China, que se cree será en octubre o noviembre, según lo dicho por varios analistas.
La administración de Biden ha estado debatiendo si levantar algunos aranceles sobre los productos chinos como una forma de aliviar la inflación, pero los funcionarios estadounidenses han dicho que no se dará una decisión hasta saber qué resultados entregará la llamada.
En marzo, cuando Biden habló por última vez con Xi, advirtió sobre las “consecuencias” si Beijing brindaba apoyo material a la guerra de Rusia, y el gobierno de EE. UU. cree que esa línea roja no se ha cruzado en los meses posteriores.
De otro lado, un portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China se negó a dar detalles de la llamada. En el comunicado el portavoz agregó: “Los jefes de Estado de China y Estados Unidos mantienen la comunicación utilizando varios medios”, El vocero puntualizó: “China anunciará información sobre esto de manera oportuna”.
Escrito por Humberto ‘Toto’ Torres