El principio de acuerdo ha sido gracias a la mediación de Turquía, que se dedicará a desminar la costa ucraniana.
Los gobiernos de Rusia y Ucrania han logrado un importante principio de acuerdo con la mediación de Turquía para permitir la salida desde Odesa de barcos cargados de trigo, según ha informado el periódico ruso ‘Izvestia’ citando fuentes directas del Kremlin.
De acuerdo con estos informes, el ejército turco será el encargado del proceso de desminado y retiro de cualquier otro tipo de explosivo de las aguas ucranianas. Hasta ahora, el acuerdo solo cuenta para Odesa.
Los buques saldrán del puerto acompañados de escoltados turcos hacia aguas neutrales del Mar Negro. Después de pasar el Bósforo, pasarán a ser escoltados por buques de guerra rusos que garantizarán su paso seguro y evitarán provocaciones”, indicó esta fuente.
Se estableció que el principio de acuerdo será ratificado a mediados de esta semana, después de que los ministros rusos de asuntos exteriores y defensa, Sergei Lavrov y Sergei Shoigu, se reúnan con sus homólogos en la capital turca el 8 y 9 de junio. En las conversaciones también han participado representantes de Naciones Unidas.
Asimismo, el periódico ‘Izvestia’ aclara que el grano ucraniano se entrega actualmente a la Unión Europea por ferrocarril y otros medios terrestres, lo que ha causado retrasos para llegar a sus consumidores finales.
El acuerdo se logra en un momento en el que los cereales han subido de forma considerable. Ucrania, es quinto en el mundo en distribución con un 9% de los envíos. Desde el inicio de la guerra están bloqueados cerca de 22.5 millones de toneladas de cereales en puertos ucranianos.
Más allá del principio de acuerdo, la desconfianza entre las partes es máxima. El ministro de exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba, considera que el presidente ruso miente cuando dice que no atacará la ciudad ucraniana de Odesa, único puerto comercial del país que aún no controla Moscú.
Importantes analistas opinan que Rusia planea tomar el control del este y sur de Ucrania, desde el Donbás hasta la península de Crimea, que ya se anexionó en 2014. Apoderarse de Odesa le permitiría completar un corredor hasta Moldavia y convertir a Ucrania en un país sin acceso al mar.
Recientemente, barcos rusos con misiles de crucero a bordo se encontraban en el Mar Negro, y aún existe la amenaza de que los agresores desembarquen en Odesa.