La guerra Ucrania - Rusia, deja y sigue dejando una profunda crisis económica, tanto para quienes están directamente involucrados, como para aquellos que manifiestan apoyo indirecto. Las crisis dejan vencedores y perdedores, en algunos casos, aparecen quienes ganan sin estar involucrados; eso es precisamente lo que ocurre en este caso con India.
Estados Unidos y el bloque de la Unión Europea insisten en sus medidas de sanciones económicas para desgastar la economía rusa. Sin embargo, los reportes económicos señalan que los más afectados son los miembros del club de los 27, quienes se enfrentan a un aumento en los precios de los combustibles, a una inflación insostenible y record en los últimos años que ya empieza a preocupar a los 27 países miembros de la Unión Europea.
La India, pese a las presiones del Bloque de occidente, se ha mantenido neutra y se abstiene de condenar la invasión porque sabe que puede sacar algunos beneficios. Este es un ejemplo claro que nos enseña cómo funcionan las relaciones internacionales.
Cada día, El Kremlin vende menos petróleo a los países europeos, esto, producto de las sanciones. De esta manera Rusia se ha visto en la necesidad de buscar nuevos destinos para sus productos energéticos, caso petróleo y gas. Moscú y nueva Delhi han encontrado la manera de aumentar los negocios petroleros que benefician a las dos naciones.
Dadas estas condiciones, Rusia encontró en India un tipo de intermediario para poder vender su petróleo a occidente. Moscú vende su crudo a la India con precios bajos para que Nueva Delhi lo venda más caro a Europa, según lo informó en un artículo El Mundo.
"India se está convirtiendo en el centro de refinación de facto para Europa", señala un informe reciente de los analistas del banco de inversión RBC Capital Markets.
En esta movida económica liderada por Rusia e India, el crudo ruso llega a las grandes refinerías del país indio para ser transformado en diésel y en otros combustibles para luego darle como destino los países occidentales.
Como consecuencia, los países europeos están importando la inflación a sus territorios. Razón por la cual resultaba más barato importar petróleo a través de tuberías desde Rusia que importar en barcos desde la India.
Durante todo el 2021 India importó de Rusia 12 millones de barriles de crudo. Actualmente, recibe unos 600.000 barriles diarios, lejos de los 90.000 del año pasado. Este 2022 los números muestran un claro crecimiento: en marzo, India compró a Rusia 11 millones de barriles. En abril fueron 27 millones, y en mayo 21 millones.
India aprovecha los precios bajos del petróleo del Kremlin y se adhiere a la ecuación para sacar dividendos, donde el crudo de los Urales de Moscú está en unos 95 dólares por barril, mientras que el precio medio del barril de Brent, el que se utiliza como referencia en Europa, se acerca a los 120 dólares.
Esta ventaja que India ha aprovechado, explica el porqué algunos países prefieren la neutralidad en algunos conflictos internacionales, dejando como prioridad hacer buenos negocios, mientras que los países que toman partido sumergen a sus habitantes en profundas crisis e inflación.
Escrito por Humberto ‘ToTo’ Torres