En uno de los mejores y más recientes escenarios construidos para la práctica del fútbol americano en Estados Unidos, Los Ángeles Rams se impusieron ante los Cincinnati Bengals, por 23-20 y consiguiendo su segunda corona de Super Bowl.
Las acciones en el SoFi Stadium iniciaron con mucha presión por parte de los Bengals, que rápidamente sería disminuida por el buen trabajo defensivo de los Rams, quienes lograron irse arriba gracias a un touchdown elaborado por un gran pase de Mathew Stafford.
Los Bengals descontaron, pero sus rivales seguían sumando otro touchdown y con un 13-10 el partido se fue al medio tiempo. Una incidencia importante antes del descanso es la lesión de Beckham Jr, quien iba a ser una baja vital en las acciones de la segunda parte, pues el peso ofensivo de los Rams se perdió durante gran parte del juego.
Los de Cincinnati reaccionaron rápido tras la salida de vestuarios y le dieron la vuelta al partido en los primeros minutos de juego con un touchdown y un gol de campo. Joe Burrow, quien apenas había gravitado en el césped durante la primera parte, se tomó un segundo aire y guió a su equipo a montarse en el partido.
Sin embargo, hasta ahí llegó el ímpetu de su equipo. Los angelinos no querían perder ante su gente y sacaron la casta de figuras como Cooper Kupp y Mathew Stafford. La conexión entre estos dos jugadores permitió a su equipo llegar hasta la última yarda en una arremetida ofensiva y marcar el touchdown que daría el campeonato al equipo local.
De esta manera, Los Ángeles RAMS ganaron su segundo Super Bowl en la historia y se convierten en el quinto equipo que gana el título en su estadio (segundo año consecutivo que eso sucede), Cooper Kupp fue elegido como el jugador más valioso de esta edición y también mejor jugador ofensivo de la temporada.
Rafael David Arámbula Ochoa.