El desarrollo de la comprensión auditiva es una parte importante del aprendizaje de una segunda lengua. Desarrollar esa habilidad significa ser capaz de comprender fácilmente a la otra persona, reaccionar a sus preguntas y comunicarse con eficacia. Conscientes de la importancia de saber escuchar y entender, los expertos de Babbel, app de referencia en el aprendizaje de idiomas en línea, han recopilado los cuatro consejos a tener en cuenta para lograr alcanzar buenas competencias en otras lenguas.
Escoger bien el contenido
Aunque pueda parecer un asunto de menor importancia, este es el primer paso y es clave para el resto del proceso de aprendizaje. Elegir un podcast, diálogo o audio acorde al nivel que se está aprendiendo es fundamental, de lo contrario, puede aparecer la frustración o la desmotivación por no llegar a comprender lo que se está escuchando. Además, es interesante seleccionar un contenido que sea acorde a los gustos y preferencias de cada uno, así, todo será mucho más motivador. Es habitual en mucha gente que empiecen a aprender un idioma con el objetivo de querer entenderlo todo de inmediato cuando, en realidad, hay que ser consciente de que la comprensión auditiva es un proceso gradual. Incluso, al escuchar un audio por primera vez y centrarse en unos pocos datos (¿Cuál es el tema?, ¿de qué están hablando? o ¿quién habla?) se puede comprender lo esencial y evitar ese sentimiento negativo de desánimo.
Repetir, repetir y repetir
Solamente escuchando una y otra vez se puede llegar a una comprensión cada vez mayor y, al mismo tiempo, contribuir al desarrollo de esta habilidad. Un audio que, a priori, pueda parecer incomprensible, se irá volviendo más y más asequible a base de ir escuchándolo una y otra vez. Esto es posible en todos los niveles, incluso en el de principiante. El oyente se convierte en una especie de detective que, gracias a una serie de pistas y rastros dispersos aquí y allá, consigue poco a poco resolver el caso. Para mantener la concentración, es útil elegir audios cortos o quizás decidir escuchar audios o podcasts poco a poco, repitiendo una y otra vez esos mismos fragmentos.
El método Krashen
Cuando se aprende un idioma, es importante estar expuesto a la mayor cantidad de material lingüístico posible para favorecer el proceso de inmersión. Esta idea está vinculada también a uno de los principales supuestos en los que se basa el método Krashen sobre aprendizaje de idiomas, relativo al nivel que se quiere alcanzar, y que Babbel sigue para crear sus materiales de audio y podcasts. Según Krashen, para que se adquiera una lengua, el input que se ofrece al alumno debe ser comprensible, pero también progresivamente más difícil o más estimulante. De ahí la noción de “i + 1” (“input +1”). Es decir, es importante que el alumno seleccione material interesante pero también calibrado con el nivel que se quiere conseguir, con la idea de ir adquiriendo más vocabulario, gramática y capacidad de entendimiento.
Las transcripciones son buenas aliadas
Las transcripciones se convierten en buenas aliadas después de haber escuchado la pieza un par de veces y ya se tenga una idea más precisa y concreta de lo que se está hablando en la pista de audio. De hecho, la transcripción puede servir para comprobar lo que se ha entendido, pero también para despejar dudas sobre lo que no se ha oído bien o, incluso, para descubrir el significado de esa frase que no has entendido del todo mientras escuchabas. En cualquier caso, las transcripciones pueden convertirse en el complemento perfecto para sacar el máximo provecho a los ejercicios de comprensión auditiva.
“El primer paso para aprender un idioma, es delimitar el nivel en el que está el alumno y establecer a cuál quiere llegar en un periodo realista de tiempo. Solo entonces se podrán escoger unos materiales acordes que consigan mantener la motivación durante todo el proceso y estar alineado con unos objetivos reales”, ha declarado Gianluca Pedrott, Senior Editor en el Departamento de Didáctica de Babbel.